Ante el aislamiento, los artistas de Bariloche se muestran por internet
Qué hacen los artistas y activistas durante la cuarentena para seguir mostrando (y viviendo de) lo que hacen.
Los artistas que no tienen un empleo remunerado sentirán los efectos de las necesarias medidas dispuestas por el Gobierno.
Recitales, espectáculos, conciertos y obras de teatro. El avance de la pandemia del coronavirus arrasó también con la agenda cultural de Bariloche. Pero la creatividad no se quedó atrás y la cuarentena habilitó conciertos y funciones online y hasta clases virtuales.
“Esto es un golpe mortal para la cultura. Este encierro paraliza la actividad y deja a un sinfín de trabajadores de la cultura en general y del teatro en particular en una situación de muchísima vulnerabilidad”, sintetizó el teatrista Maximiliano Altieri.
Consideró que “los artistas deben estar atentos a los cambios, buscar nuevas formas de representación y aprovechar este momento para producir material y que superado el encierro, la cultura se convierta en una fuerza arrolladora protagonista de esos cambios”.
La música Pepa Díaz reconoció que “los conciertos en vivo son la principal fuente de ingresos de la gran mayoría. Algunos tienen sus canciones inscritas en Sadaic y Aadi Capif y reciben sus comisiones cada cierto tiempo pero no es acá donde ven mayores ganancias”.
La directora Virginia Fdel recordó que “la mayoría de los hacedores del arte, en todas sus aristas: actores, músicos, titiriteros, artistas plásticos, escritores, autores, editores, productores, gestores, técnicos, no suelen tener trabajo en blanco”.
“La mayoría se vio de un momento para el otro sin trabajo y sin poder de acción”, resumió. Contó que muchos artistas realizan conciertos a través de las redes sociales para mostrar la producción artística. “Es maravilloso –agregó Fdel– porque pone nuevamente al arte en el lugar que le corresponde. Demuestra que no sólo es entretenimiento sino una herramienta más de transmisión y aprendizaje, de conexión y de sanación. Un excelente medio para trascender el encierro”.
La directora sugirió “la posibilidad de redireccionar fondos públicos que se utilizarían para eventos, fiestas populares y ciclos pautados en estos meses, para solucionar en la inmediatez las carencias de los artistas”.
El actor y docente Adrián Marré reconoció que “con su grupo de improvisación, están haciendo algunas intervenciones en Facebook pero no implica un ingreso económico sino es más bien algo para divertirnos y divertir a quien nos quiera ver”.
Dijo que “no espera ningún apoyo del sector público ya que no hay interés en general para apoyar a la cultura. Por suerte, tengo un pequeño sueldo en blanco porque dicto unas horas en una escuela”.
Regalías y proyectos
Paola Vázquez, gestora cultural, admitió que han pedido a los medios de comunicación que se sumen a la difusión de material de artistas de la ciudad.
“Eso ayuda en pequeña medida a quienes tengan registradas sus canciones en Sadaic para que vuelva un pequeño recurso económico por el solo hecho de estar en el medio”, dijo y aseguró que “habrá que estar muy alerta a las disposiciones del Ministerio de Cultura de Nación para presentar proyectos que alivianen a futuro en forma de subsidios o becas”, consideró.
“Difundiendo material de lectura, de escucha, audiovisual se busca generar un vínculo entre la comunidad artística y quien está en su casa sin saber qué hacer”, dijo Vázquez.
Verónica Cutillo coordina un centro cultural que también se vio afectado por el “parate general”. “Doy clases en este espacio. Con mucha ayuda y consultas, ensayo, prueba y error, las transformé en clases online interactivas, con día y horario fijos. En principio, para mis alumnos pero ahora gente de todo el país está participando”.
En abril, la mujer habilitará “clases a la gorra” a través de transferencias bancarias de quienes puedan colaborar.
“Sin dejar a nadie afuera porque cada situación en particular es distinta. Hay gente que cobrará sueldo y otros que no”, dijo.
Atentos entonces a las propuestas en cada aislamiento.
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