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Antes de ser echados, dos funcionarios crearon una empresa en Bariloche
Alejandro Nahuelquín y Verónica Picapietra dejaron sus cargos la semana pasada a pedido de Carreras. Meses antes habían constituido una sociedad por acciones simplificadas de amplio alcance.
Alejandro "Taca" Nahuelquín y su esposa ingresaron al Gobierno provincial con la gestión de Weretilneck y habían sido ratificados por Carreras hasta la semana pasada. Archivo
Alejandro “Taca” Nahuelquín y Verónica Olea Picapietra crearon una empresa multifunción en Bariloche meses antes de dejar el Gobierno de Río Negro, luego de que la mujer haya sido interceptada diez días atrás en un vehículo oficial con 3 millones de pesos en efectivo distribuidos en fajos.
Picapietra era directora de Energías Aisladas y Nahuelquín director de Políticas Sociales Tradicionalistas. Ambos funcionarios fueron designados por el exgobernador Alberto Weretilneck y ratificados en enero de este año por Arabela Carreras quien la semana pasada les pidió la renuncia tras hacerse público el polémico incidente de los 3 millones de pesos.
El origen y destino de ese dinero en efectivo no se clarificó y el bloque de legisladores del Frente de Todos pidió explicaciones a la superior de Picapietra, Andrea Confini, secretaria de Energía de la provincia.
Ahora, RÍO NEGRO pudo conocer que los dos funcionarios desplazados gestaron meses atrás una sociedad comercial que fue reconocida por la Dirección de Personas Jurídicas el 15 de octubre pasado, tres semanas antes del incidente polémico, aunque fue constituida el 26 de agosto.
La sociedad por acciones simplificada, Huilen, tiene como únicos accionistas al matrimonio Nahuelquín- Picapietra, quienes se declaran de profesión ser “comerciantes”, domiciliados en la calle Soberanía Argentina a pocos metros de Onelli, en Bariloche.
La Sociedad por Acciones Simplificadas es un nuevo tipo de sociedad que se constituye de forma más rápido y con trámites más simples que una sociedad anónima, según la Ley 27.349.
La sociedad comercial fue fijada en un domicilio de un edificio céntrico de la ciudad andina, a pocos metros del Centro Cívico.
Según la constitución de esta sociedad -que fue publicada ayer en el Boletín Oficial de la Provincia-, el objetivo es muy amplio como dedicarse a la “producción intercambio, fabricación, transformación, comercialización, intermediación, representación, importación y exportación de bienes materiales, incluso recursos naturales, e inmateriales”.
Comprende además la prestación de servicios relacionados directa o indirectamente al rubro agropecuario, vitivinícola, comunicaciones, editoriales y gráficas de cualquier soporte; culturales y educativas; desarrollo de tecnología; gastronomía y hotelería; inmobiliarias y constructoras; inversiones financieras; petroleras, forestales, mineras y gasífiras; salud y transporte.
El reconocimiento de esta sociedad comercial les permite operar en el país y el extranjero.
El capital societario que se declaró para el inicio de la actividad fue de 37.800 pesos, dividido en partes iguales entre Nahuelquín y Picapietra, quienes se designan como gerente titular el primero y suplente la mujer.
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