Plazo fijo UVA y aguinaldo: las 5 cosas que debés saber tras los cambios del Banco Central
La autoridad monetaria dispuso una serie de cambios sobre los plazos fijos, tanto tradicionales como UVA. Conocé cómo quedan estas herramientas de aquí en adelante.
Plazos fijos UVA. En qué cambian tras las disposiciones del Banco Central.
Bajo un régimen de muy alta inflación, como el que hoy atraviesa la Argentina, y con el cobro del medio aguinaldo la pregunta del millón es cómo reguardar el poder adquisitivo de los ahorros. En este contexto, el Banco Central dispuso una serie de modificaciones sobre los plazos fijos, una de las herramientas financieras más tradicionales de Argentina. Qué pasa con los plazos fijos UVA.
Con el fin de suprimir el stock de Leliqs, el Gobierno decidió reducir la tasa de interés que estos instrumentos pagan, pese a la aceleración inflacionaria. Esto tiene un impacto directo sobre los plazos fijos tradicionales, cuya tasa nominal anual (TNA) pasa de 133% a 110%. Ello significa que su rendimiento efectivo pasa a ser de 9,1% mensual, muy por debajo de la inflación observada y esperada.
En este contexto, los plazos fijos UVA emergen como alternativa. Sin embargo, hay puntos a tener en cuenta antes de decidir colocar los ahorros en esta herramienta financiera. A continuación, enumeramos 5 claves que no debés pasar por alto.
1. ¿Qué son los plazos fijos UVA?
Según el Banco Central, un plazo fijo UVA es un instrumento de ahorro protegido de la inflación. Los pesos colocados se convierten en UVAs (Unidades de Valor Adquisitivo), las cuales se actualizan por el Coeficiente de Estabilización de Referencia (“CER”) que sigue al índice de precios al consumidor (IPC). Ello garantiza que los ahorros allí colocados no pierdan contra la inflación.
2. ¿Cuánto pagan los plazos fijos UVA?
El rendimiento que otorgan los plazos fijos UVA consta de dos partes. Por un lado, los ahorros diariamente se actualizan en base a la última tasa de inflación publicada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Por el otro lado, adicionalmente pagan una tasa de interés marginal del 1% anual (0,08% efectivo mensual).
3. ¿Cuál es el plazo mínimo de un plazo fijo UVA?
Para lograr el rendimiento total de inversión (actualización por inflación más tasa del 1% anual), el ahorrista debe colocar sus pesos por un plazo mínimo de 90 días. Sin embargo, existe la posibilidad de cancelar anticipadamente (precancelar) el plazo fijo UVA a partir del día 30 desde su constitución, y en tal caso el ahorrista cobrará una tasa de interés fijada de antemano en lugar de obtener el rendimiento total. Es decir, ya no logrará la actualización por inflación.
4. ¿Qué cambió con las disposiciones del Banco Central?
El Banco Central dispuso que las entidades bancarias sigan ofreciendo esta alternativa a sus clientes, pero ahora serán ellas quienes establezcan la tasa de interés a pagar en caso de precancelación. Antes, existía para tales casos una tasa mínima fijada por la autoridad monetaria, que era unos puntos menor que la TNA de un plazo fijo tradicional (110% al día de hoy). Al dejar existir tal límite, se descuenta que los bancos paguen por precancelación una tasa muy por debajo de la inflación, lo que motiva (y casi obliga) a los ahorristas a inmovilizar sus ahorros durante 90 días.
5. ¿Qué pro y qué contra tiene un plazo fijo UVA?
La principal ventaja radica en que, a la fecha, los plazos fijos UVA son la única alternativa que permite indexar los ahorros a las tasas de inflación, garantizando que los mismos no pierdan poder adquisitivo. La principal desventaja es que tienen un costo de oportunidad potencialmente alto, ya que para lograr la actualización por inflación se deben inmovilizar los pesos por al menos 90 días, plazo en el que se corre el riesgo de que acontezca un salto cambiario importante.
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