El largo invicto de la Selección: sólo una estadística, no una carga

El seleccionado de Scaloni lleva 24 partidos sin perder y se acerca a los 33 encuentros sin caídas del equipo del Coco Basile, una marca top que se interrumpió de la peor manera.

“No soy fanático de las estadísticas, son sólo números. Los partidos siempre hay que jugarlos”, dijo con sobriedad y casi por compromiso Lionel Scaloni cuando se le consultó por el largo invicto que ostenta la Selección Argentina antes del partido contra Uruguay, un rival temible que ponía a prueba la imbatibilidad albiceleste.

Luego de vencer de manera notable a la Celeste por 3-0 en la noche del domingo en el Monumental, Argentina alcanzó la cifra de 24 encuentros sin derrotas y se acerca a la marca top que pertenece al seleccionado dirigido por Alfio Basile, que llegó a los 33 partidos sin caídas entre 1991 y 1993.

Este seleccionado argentino de Scaloni no pierde desde hace más de dos años. La última fue el 2 de julio del 2019 cuando cayó 2-0 ante Brasil en Belo Horizonte, por las semifinales de la Copa América 2019, el día que Lionel Messi alzó la voz como capitán argentino y atacó con dureza a la Conmebol por los supuestos favores arbitrales hacia el equipo anfitrión.
A partir de ahí no perdió más. Ganó 15 partidos, igualó 7 y en el restante venció por penales a Colombia (1-1 en los 90 reglamentarios) por las semifinales de la Copa América 2021.

Lionel Scaloni le da indicaciones a Ángel Di María, durante el partido ante Uruguay.

Aquella Copa América del 2019 fue la primera prueba de fuego para Scaloni al frente del seleccionado. No fue nada fácil para el DT, con un inicio lleno de dudas y con derrota en el debut ante Colombia (2-0) y empate ante Paraguay (1-1) en la segunda presentación. Luego vendrían las victorias ante Qatar (2-0) y Venezuela (2-0 ) para enderezar el rumbo y alcanzar las semifinales.

En la victoria 2-1 por el tercer puesto a Chile (6/7/19, Río de Janeiro), comenzaría a enlazarse la serie invicta de esta selección, que va en busca del registro del equipo de Alfio Basile, en su primera experiencia al frente del seleccionado.

En aquel equipo del Coco, el invicto comenzó a gestarse desde el inicio mismo del ciclo. El 19 de febrero del 1991 en Rosario, Argentina venció en un amistoso a Hungría por 2-0, con goles de Darío Franco y Antonio Mohamed. Luego llegaría cinco empates consecutivos, hasta la Copa América Chile 1991, que ese seleccionado ganaría en forma brillante.

Le siguieron algunos amistosos, la conquista de la Copa Rey Fahd y el breve regreso en este ciclo de Diego Maradona. El ‘10’ volvió a la selección para la copa “Centenario de la AFA” ante Brasil (1-1) en el Monumental y la Copa Artemio Franchi, en Mar del Plata, que Argentina le ganó por penales a Dinamarca.

La Selección ya llevaba más de 20 encuentros invictos y la marca comenzó a ser una obsesión para todo aquello que rodeaba al equipo y no una consecuencia natural de su buen juego colectivo e individual.

Argentina fue a defender a Ecuador en junio del ’93 el título continental conquistado en Chile y luego de ganarle en el debut a Bolivia (1-0), lo que vino después fueron sólo empates y triunfos por definición por penales. Por esa vía dejó en el camino a Brasil en cuartos (7-6) y a Colombia en semis (6-5), para volver a la victoria en el tiempo reglamentario recién en la final contra México (2-1).

Para esa selección de Basile, la estadística comenzó a transformarse de a poco en una carga y quizás le haya impedido ver al entrenador que el equipo necesitaba aires de renovación, más allá de los títulos y su mote de invencible.

En la Eliminatoria rumbo al Mundial de Estados Unidos ‘94, que por entonces se jugaba íntegra a lo largo de un mes, el equipo del Coco dejó el invicto el 15 de agosto de 1993 en el Estadio Metropolitano de Barranquilla. Ese día Colombia ganó 2-1 con goles de Iván René Valenciano y Adolfo Valencia. Para Argentina descontó el Mencho Ramón Medina Bello.

El fin de aquel equipo altivo y ganador no se tradujo sólo en la pérdida del invicto, sino que escondía también un deterioro futbolístico que quedó tristemente plasmado en 0-5 de la revancha ante Colombia en el Monumental. Vendría luego el repechaje con Australia y el llamado desesperado a Diego Maradona para que regrese al equipo y desde su aura milagrosa pudiera conducir el equipo al Mundial.

El doloroso 5-0 de Colombia sobre Argentina en el Monumental desnudó todas las falencias del equipo del Coco Basile.

Desde aquel arrogante y vanidoso equipo ganador de Basile a este de Scaloni, han pasado casi 30 años. Los mismos que tardó el seleccionado en volver a gritar campeón.
El ciclo del Coco nació invicto, el de Scaloni se hizo al andar y es por eso que sería saludable recordar aquello del principio: “…Son sólo números. Los partidos siempre hay que jugarlos”.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios