El municipio de Bariloche estudia fórmulas para recomponer sus ingresos

El área de Hacienda analiza la posible reapertura del pago anual de tasas anticipado o lanzar una moratoria. En cualquier caso, deberá pasar por el Concejo Deliberante.

El impacto de la parálisis económica en las cuentas públicas comenzó a generar huecos cada vez más difíciles de resolver y el gobierno municipal ya evalúa la adopción de herramientas nuevas para enfrentar la crisis, que podrían pasar por una moratoria tributaria y por nuevos llamados al pago anticipado de tasas.

El secretario de Hacienda, Diego Quintana, explicó que la moratoria podría consistir en un plan de recuperación de deuda mediante quitas de capital o de intereses, pero aclaró que en cualquier caso no será decisión excluyente del Ejecutivo ya que debe ser aprobada por ordenanza, lo cual demandará que “el Concejo entre en actividad” y que se produzcan los necesarios acuerdos políticos.

En el marco del freno abrupto que sufrió la economía local por la cuarentena dictada hace ya un mes y medio, el municipio suspendió también las intimaciones y recursos judiciales contra los deudores.

Pero Quintana no pierde de vista que los incumplimientos acumulados por los contribuyentes representan para el municipio una acreencia a la que podría apelar, si diseña un “gancho” suficientemente atractivo. El funcionario calculó que en total el municipio tiene un potencial de recupero de 600 millones de pesos por tasas y derechos impagos.

Dijo que el monto de la eventual quita que beneficiaría a los contribuyentes no está decidido y sería uno de los puntos a discutir en el Concejo.

Según Quintana, aun en una crisis como la actual, puede haber contribuyentes interesados en ponerse al día si se le ofrecen condiciones convenientes y “si tiene un ahorro o excedente” para aplicar con ese fin.

Otro recurso extraordinario para engrosar la caja municipal y sortear la caída actual de ingresos podría ser la reapertura del pago anual anticipado para la tasa de Servicios, que venció en febrero y cuyo resultado esta vez estuvo por debajo del registrado en años anteriores.

Sobre 55.000 frentistas gravados, este año adelantaron el pago de todas sus obligaciones de 2020 (con descuentos de hasta el 35%) un total de 17.000. En conjunto aportaron al municipio un total de 120 millones de pesos. El año pasado habían sido 17.000 los suscriptores del pago anual, de modo que el gobierno entiende que allí hay un segmento “para trabajar”.

La caída del interés de los contribuyentes tendría que ver, entre otras razones, con la quita poco tentadora en relación con la inflación estimada, y también con los aumentos aplicados en la tasa, que este año en algunos casos alcanzaron el 60%.

Quintana dijo que otra de las opciones que analizan es ofrecer el pago adelantado con nuevas ventajas de sus tasas de 2021. “Si tienen un ahorro y lo quieren aplicar podrían cancelarlas al monto actual, sin aumento”, refirió el secretario de Hacienda.


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