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Plantas autóctonas: La orquídea de las mariposas
Es una planta de pequeñas dimensiones y de crecimiento cerrado. Suele encontrarse en caminos abiertos, arenosos, húmedos y anegados.
Como todas las semanas, es momento de repasar algunas especies de plantas autóctonas, de esas que podemos encontrar a lo largo y ancho de nuestro territorio nacional y que muchas veces vemos sin prestarle atención. En esta oportunidad, entonces, conoceremos a la famosa “orquídea de las mariposas nocturnas”, una maravilla silvestre fácilmente identificable.
Las orquídeas del género Habenaria comprenden 600 especies de zonas tropicales y subtropicales. En Argentina podemos encontrarnos con 15 especies, mientras que en la región patagónica tenemos solamente una. Así lo explica Hernán López, integrante del Taller Multidisciplinario de Plantas Vasculares y Laboratorio de Ecología de Bordes, de la Universidad de Flores (sede Comahue). Además, actualmente Hernán es el curador responsable del Jardín Botánico de la Ciudad de Plottier.
Esta maravilla de la naturaleza no posee nombres comunes, y su nombre científico es Habenaria pumila Lindl, de la familia Orchidaceae.
El nombre del género Habenaria proviene del latín y significa “rienda” o “correa”, “aludiendo a la estructura denominada espolón que se encuentra en sus flores, que suele ser muy largo en algunas especies”, indica el profesional. En cuanto a su nombre específico “pumila”, se refiere a pequeño, de crecimiento corto o cerrado, indicando que es una planta de pequeñas dimensiones. Suele encontrarse en caminos abiertos, arenosos, húmedos y anegados de zonas ribereñas.
“La especie tiene un área geográfica que resulta de interés para las personas que estudian estas plantas”, aclara López, “y habita en el sur de Chile y en Argentina. Se la puede encontrar en el sur de la provincia de Buenos Aires y también en la provincia de San Juan”.
En la Patagonia la podemos encontrar tanto en la provincia de Rio Negro como también en Neuquén y, según el experto, “este año fue descubierta una población de esta pequeña especie en el Parque Nacional Lanín”.
En cuanto a la descripción botánica de la especie, el profesional explica que se trata de orquídeas terrestres, las plantas son gráciles, de una altura de 20 a 40 centímetros de altura y presenta tubérculos elípticos con raíces delgadas de forma cilíndricas.
En cuanto a las hojas, cuyas medidas de 5 a 10 centímetros de longitud y 12 milímetros de ancho, con forma lanceolada, es decir, en forma de lanza, agudas en el ápice y con una base envainadora de posición erguida y dispuestas escalonadas en el tallo y disminuyendo de tamaño hacia el ápice.
Las flores se reúnen en inflorescencias de 7 a 10 cm de longitud, de forma densa con flores pequeñas de color verdoso. También las flores poseen hojas especiales denominadas brácteas de forma oval a lanceolada, agudas, cubriendo el ovario de la flor. Los sépalos de posición dorsal que son parte de la flor miden 7 milímetros de longitud y 4,5 milímetros de ancho de forma ovalada, cóncavo, acuminado, es decir con una prolongación en el ápice, con nervio central prominente. Los sépalos de posición lateral miden 7,5 mm de largo y 2,5 mm de ancho, algo oblícuos, oblongos, acuminados. Los pétalos son filiformes es decir muy delgados y arqueados y el labelo que es la porción mas prominente de la flor, se encuentra partido en 3 segmentos: el lóbulo central de 7 mm de largo y 1 mm de ancho con ápice obtuso; los lóbulos laterales filiformes de 7,5 a 8 mm de longitud y 0,25 mm de ancho, divergentes; espolón recto o apenas ensanchados de 13 a 15 mm de longitud.
“En cuanto a los mecanismos de la reproducción sexual de la especie, las orquídeas en general son plantas que han desarrollado un mecanismo reproductivo muy especializado” explica López. Además, comenta que “para atraer polinizadores para su reproducción y suelen generar estructuras para emitir atractantes en forma de aromas y recompensas en forma de néctar”.
En el caso especial del género Habenaria, las flores presentan un espolón que es una estructura en forma de tubo, que aloja el néctar. Esa estructura es utilizada por la espiritrompa de mariposas diurnas y especialmente mariposas nocturnas o polillas del grupo de los esfíngidos con el fin de absorber el néctar, la cual es una solución azucarada con una concentración entre 18 a 26% de azúcar.
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