Por la falta de petróleo, cierra la única refinería del Norte Argentino
Se trata de Refinor, cuyo complejo industrial está en Salta. La caída de la producción de la zona obligaba a llevar el crudo en camiones.
Hace 32 años abrió el Campo Durán la que hasta ahora era la única refinería de las provincias del Norte Argentino, Refinor, que estaba a cargo de procesar el petróleo y el gas de la Cuenca del Noroeste. Pero eso fue hasta la semana pasada, cuando la refinería apagó definitivamente sus quemadores ante la brutal caída en la producción de crudo de la zona.
La definición del cierre de la refinería fue dada a conocer la semana pasada por la misma Refinor, una sociedad formada en un 50% por YPF e igual porcentaje por Integra, una firma de José Luis Manzano que adquirió a Hidrocarburos del Norte SA. Desde la compañía se marcó que «la compañía ha resuelto discontinuar las operaciones de refinación en el Complejo Campo Durán».
Y explicaron que «esta decisión se toma con responsabilidad, teniendo en cuenta el sostenido declive de la Cuenca NOA y su impacto en la disponibilidad de petróleo crudo, pero sobre todo, con una mirada puesta en la sustentabilidad del negocio».
La refinería se montó dentro del mismo bloque de Campo Durán para procesar el petróleo que se extraía de esa zona, pero ya desde hace un tiempo, la caída en la producción los esos campos pozos maduros venía generando importantes inconvenientes.
Ante la imposibilidad de acceder por oleoductos desde Vaca Muerta, como sucede con otras refinerías del país, el petróleo venía siendo remitido en camiones, una logística que dispara los costos y que, para ser sostenida, debía necesariamente trasladar esos mayores costos a los precios en surtidor.
Esto es lo que se definió no seguir haciendo, y en consecuencia, tras el cierre de la refinería lo que Refinor continuará haciendo es recibir en su red de almacenamiento los combustibles ya elaborados por otros complejos industriales, para su distribución en su red de 76 estaciones de servicios.
Desde Refinor se planteó que la «decisión estratégica» adoptada, «marca una nueva etapa». Y señalaron que la firma «ha decidido reconvertir su modelo de negocios con el objetivo de adaptarse a los desafíos actuales y aprovechar plenamente las oportunidades que ofrece hoy la matriz energética argentina».
La caída de la producción de petróleo cercano no solo afecta a esta refinería, sino que es algo que también se observa en el complejo de YPF en Luján de Cuyo, Mendoza. En este caso, la segunda refinería más grande de YPF lo que hizo fue ampliar los oleoductos que llevan el petróleo desde Vaca Muerta y a la vez reformular sus instalaciones para «correr» con ese crudo más liviano.
Hace 32 años abrió el Campo Durán la que hasta ahora era la única refinería de las provincias del Norte Argentino, Refinor, que estaba a cargo de procesar el petróleo y el gas de la Cuenca del Noroeste. Pero eso fue hasta la semana pasada, cuando la refinería apagó definitivamente sus quemadores ante la brutal caída en la producción de crudo de la zona.
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