Crimen de Julián Dobra en Roca: una por una las pruebas y los interrogantes del caso
El inicio del proceso contra los cinco detenidos abrió una catarata de interrogantes que la fiscalía y querella intentarán demostrar. Tienen cuatro meses para probar su teoría del caso: ¿Hay una mujer relacionada con el hecho?
Julio César Salgado, Leandro Navarro y Walter Méndez, los mayores imputados. Foto: Juan Thomes.
Luego de una semana de absoluto hermetismo, en menos de 24 horas salieron a la luz una gran cantidad de elementos alrededor de la muerte de Julián Dobra. ¿Alcanzan para saber quién o quiénes lo mataron, y por qué?
Eso será trabajo de la fiscalía y la querella, que ya parten con una base (sólida según el juez de la causa) para empezar a probar que los cinco detenidos está involucrados en el violento crimen del joven roquense y que se distribuyeron tareas no solo para matarlo sino también para intentar ocultar pruebas, como el auto del joven.
Por ahora las cartas que mostró el ministerio público fiscal aportan indicios. Faltan pericias. Rastros de zapatillas, de huellas de motos, informes dactilares, entrecruzamiento de llamadas, análisis del celular de Julián, chequeo de declaraciones, revisión de cámaras de seguridad públicas y privadas.
Tendrán cuatro meses para juntar toda la evidencia posible que sustente una acusación contra los cinco detenidos, dos de ellos menores de edad punibles. Uno de 16 años y el otro de 17.
Por ahora creen que pueden probar que todos prestaron colaboración para matarlo y esconder pruebas. Todavía no tienen claro si el autor de los dos disparos que dieron en la cabeza de Julián (uno quedó en el cuero cabelludo) está entre los detenidos o hay más participantes en el hecho.
En la audiencia de formulación de cargos, los fiscales Belén Calarco y Marcelo se distribuyeron el repaso de una gran cantidad de entrevistas que se tomaron en los días previos a las detenciones de Julio César Salgado, Leandro Navarro, Walter Méndez, y los dos menores.
Algunas de las conclusiones que dejaron esas declaraciones fueron:
*La hermana de un preso alojado en la cárcel de Roca le contó que un compañero de celda estaba preocupado porque su hermano menor le había mandado una foto manejando el auto de Julián, le dijo que “andaban con el cuerpo en el auto” y no sabían qué hacer con él.
*La exnovia de Julián dijo que hacía varias semanas que no lo veía, pero que había tenido una relación conflictiva.
*La mamá de uno de los detenidos testificó que en las últimas semanas había visto a su hijo con Julián en reiteradas oportunidades.
*La mamá de otro de los detenidos dijo que un jovencito había pasado a buscar a su hijo por su casa en el auto rojo de Julián.
*Varios testigos coincidieron en que vieron uno de los menores manejando el auto de Julián en los días posteriores a su desaparición y que les decía que lo había comprado.
*También hubo coincidencia en que en las últimas semanas los tres mayores tenían relación con Julián y algunos, también entre ellos.
*Una mujer dijo que el día anterior a la desaparición había visto a su expareja junto a Julián, vistiendo la misma ropa con la que lo encontraron muerto.
Un arma, zapatillas, teléfonos, motos… para desentrañar el crimen de Julián
Entre los elementos secuestrados en los allanamientos del jueves hay un abanico grande de elementos.
Desde un revólver calibre 22 en la casa de uno de los menores, que coincide con el calibre de las balas que le dispararon a Julián; hasta varios pares de zapatillas de los detenidos para cotejarlas con las huellas que se encontraron tanto al lado del cuerpo como del auto incendiado.
También están secuestrados los teléfonos de los detenidos. Un elemento que llamó la atención y que complicó a uno de los sospechosos es que tenía siete llamadas seguidas al teléfono de Julián en los días previos a la desaparición, y ninguna una vez que ya no se supo nada más de él.
Entre las pericias que faltan realizar figuran también el cotejo de las huellas de motos que encontraron en el lugar donde quemaron el auto y la de algunos de los detenidos; una barreta de hierro y restos de piedras con las que podrían haberlo golpeado, entre otras cosas.
Si bien todavía faltan informes periciales, por las lesiones que tenía el cuerpo (signos de arrastre), los investigadores creen que a Julián lo mataron en otro lugar y lo “plantaron” en la barda norte de Roca.
¿Por qué lo mataron a Julián?
En la audiencia de formulación de cargos, ninguna de las partes aportó una teoría del caso concreta, pero sí contaron que Julián había tenido un conflicto con Salgado luego de enterarse que mantenía una relación con su exnovia. Ello lo llevó a “balearle” la casa a Salgado con aire-comprimido. No se profundizó si el crimen podría ser una venganza por ese hecho.
Otra de las cuestiones que desarrollaron es que en el caso había un trasfondo de drogas, pero que lo atribuían más a situaciones de consumo compartido, más que al tráfico de estupefacientes, como se había rumoreado, sobre todo en redes sociales.
¿Hay más involucrados? Para la querella, si.
¿Es una mujer? “puede ser…”, lanzaron los querellantes, aunque no especificaron si se trataría de la exnovia de Julián u otra persona.
Luego de una semana de absoluto hermetismo, en menos de 24 horas salieron a la luz una gran cantidad de elementos alrededor de la muerte de Julián Dobra. ¿Alcanzan para saber quién o quiénes lo mataron, y por qué?
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