Finalizó el trabajo de los antropólogos forenses en Neuquén: no hay indicios de una fosa clandestina

El equipo de profesionales especializados en la identificación de desaparecidos seguirá en contacto con la subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia

El equipo Argentino de Antropólogos forenses (EAAF) finalizó su tarea con el juzgado Federal de Neuquén. El organismo comunicó que no hay indicios de que en la chacra de Senguer y Anaya haya existido alguna fosa de enterramientos clandestinos.

El trabajo se realizó en forma continua entre el 29 de noviembre y el 7 de diciembre pasado. Debido a que la denuncia en la justicia Federal daba cuenta de supuestos enterramientos clandestinos en esa chacra, se sectorizó primero en dos lugares sañalados.

Luego se avanzó en todo el terreno con una modalidad de más de 20 zanjeos lineales, de más de dos metros de profundidad, en busca de indicios de cambios en el terreno que indicaran que hubo alguna intervención en el lugar. No se hallaron vestigios de modificaciones exógenas en las capas de tierra que se fueron monitoreando cada día.

Los detalles fueron adelantados en forma verbal al juzgado al cierre de los trabajos los primeros días de diciembre, y en definitiva el resultado dio negativo: no se encontraron anormalidades en el terreno que indicaran la existencia de una fosa o un enterramiento en esa chacra, ni se hallaron restos humanos durante todo el proceso.

El expediente estaba los últimos días de diciembre a la espera de una definición judicial tras el informe, sin embargo, las tareas incluyeron el relleno nuevamente del lugar intervenido.

El lugar, barrio Altos del Limay, está prácticamente en el corazón de los espacios urbanos en la mira de los desarrolladores, por su cercanía a los humedales y al río, en una zona con poca urbanización pero conectada con la multitrocha por medio de varias troncales.

Cuando comenzaron los trabajos de relleno con fines de urbanización, el juzgado recibió una denuncia concreta que señalaba ese lugar como un sitio donde hubo entierros clandestinos en tiempos de dictadura de lo que pudieron ser personas desaparecidas.

El sitio marcado bajo investigación judicial, Senguer casi Anaya, está a menos de dos kilómetros de los terrenos del Ejército, del polvorín militar, de los fondos del Batallón de Ingenieros y de sectores, como la vieja cancha de saltos hípicos, que eran propiedad del Ejército en la zona de Valentina sur, cerca de los humedales y del río.

La chacra en la que se trabajó, no estaba ni estuvo en terrenos militares, pero linda con senderos comunicados en forma directa con propiedades del Comando de la sexta Brigada y del Batallón de Ingenieros.

Según se precisó, desde el juzgado la solicitud de investigación con el EAAF finalizó o estaría en etapa de cierre de éste incidente; aunque el equipo de antropólogos especializados en la búsqueda e identificación de personas víctimas de delitos de lesa humanidad, seguirá en contacto con la provincia de Neuquén, a partir de los trabajos que se realizaron en las inmediaciones del excentro clandestino de detención y tortura (en Lanín y Chaco).

El juzgado federal dejó sin efecto las medidas de tutela que había sobre ése otro lugar que fue inspeccionado por el hallazgo de restos óseos (que resultaron no ser de humanos) en los fondos del Batallón y los primeros días de enero los antropólogos de la subsecretaría de Cultura de la provincia continuarán con la tarea de limpieza especializada de la zona.

Según precisó la titulare del área, Alicia Comelli, «el convenio para una relación continua con nuestros profesionales de cooperación y capacitación, está en borrador. Vamos a continuar con la limpieza especializada en la zona de La Escuelita; seguimos con la supervisión de los trabajos por nuestros antropólogos para una limpieza selectiva en las inmediaciones de lo que fue el centro clandestino y el lugar donde se llevaron a cabo los tormentos, y luego se realizará la preparación del resto del terreno», dijo la funcionaria.

Recordó que en marzo se prevé tener el lugar despejado para los preparativos del concurso nacional emitido para el anteproyecto ejecutivo de del Sitio de Memoria e Identidad Neuquina, que se desarrollará con fondos provinciales en las cuatro hectáreas cedidas por la Nación a Neuquén en la zona de la calle Lanin, en Valentina sur rural.


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