Los créditos hipotecarios impulsan la venta de viviendas en Bariloche

El sector inmobiliario admite que la gente opta por invertir en viviendas listas y no en lotes. Un crédito puede demorar tres meses.

Unas 700 solicitudes de créditos hipotecarios recibió la sucursal del Banco Nación en Bariloche en lo que va del año y alrededor de 100 ya se concretaron.

Horacio Medina, gerente de la entidad bancaria en la ciudad, advirtió que “Bariloche es una de las plazas que más se están moviendo con los créditos en la región, después de Neuquén”.

Remarcó que en los últimos meses se logró que “la atención sea ágil y el trámite se instrumente rápidamente. Desde el contacto con el banco hasta alcanzar la operación no suelen pasar más de 3 meses”.

María del Rosario Neme, martillera de Remax Montaña, reconoció que “desde mayo, entre el 60 y el 70% de lo que se vende corresponde a préstamos hipotecarios. Lo que cayó fue la venta de lotes porque la gente prefiere esperar, guardar ese dinero y tramitar un crédito para una casa ya que el banco suele financiar el 80%”.

La flexibilización de los requisitos para acceder a un crédito, a través de la incorporación de codeudores, también contribuyó al incremento de los pedidos.

Mariela Heredia, de Richter Propiedades, coincidió en una reactivación del mercado inmobiliario en los últimos meses, “después de los terribles años del cepo”. “De 10 operaciones que se concretan, 8 salen con crédito. Lo que más se busca es un rango entre 80 mil y 180 mil dólares pero no hay mucha oferta. Los que salen más rápido son los créditos del Banco Nación; los otros bancos pueden demorar entre 8 meses y un año y muchas veces, los propietarios se cansan de esperar”.

La demanda de propiedades se contrapone con escasa oferta ya que pocos inmuebles son aptos para crédito.

“Los propietarios tienden a querer subir un 10% el valor de venta y esto hace que las propiedades queden fuera del alcance de quienes toman créditos. Entonces, las suben pero frenan las ventas”, indicó la martillera Andrea Pena.

Los agentes inmobiliarios coinciden en que también se perdió el margen de negociación. “Los propietarios saben que sus viviendas son aptas para crédito y que pueden pedir un poco más. A la vez, con la falta de opciones, el comprador sabe que ese aumento en cuotas y a tantos años, no le significa tanto. Antes se negociaba, hoy día los vendedores se quedan plantados en ese valor”, remarcó Neme.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios