Los zoomples, ¿llegaron para quedarse?

Festejar los cumpleaños vía zoom se transformó en moneda corriente durante la cuarentena y es una moda que amenaza con mantenerse, por lo menos, hasta que la pandemia sea superada completamente.

El aislamiento social obligó a cambiar las rutinas y las reuniones sociales y familiares. Los almuerzos de domingo y las juntadas entre amigos y amigas se trasladaron a videollamadas. También los festejos de cumpleaños.

Los de marzo fueron los primeros en experimentar la nueva modalidad de cumpleaños, aunque algunos ni siquiera se “juntaron” esperando poder hacerlo, en persona, pronto. Pero la cuarentena se extendió y los de abril, mayo y, hasta ahora, los de junio, también tuvieron que mudar su festejo a las pantallas. Zoom fue la aplicación más masificada y así rápidamente los cumples se transformaron en zoomples.

El distanciamiento incluye la posibilidad de reunirse en grupos de hasta 10 personas aunque siempre conservando la distancia mínima. Esto podría marcar, de alguna forma, el retorno de los cumpleaños físicos, pero durante un largo tiempo seguramente los cumples y los zoomples convivirán. Sobre todo por el ingrediente extra de que los zoomples permiten integrar a familia y amigos que viven lejos del cumpleañero.

Desde los más pequeños hasta los más grandes se sumaron a la tendencia y, de alguna forma festejaron su aniversario: hubo zoomples “sorpresa” organizados por amigos, reuniones virtuales temáticas, decoraciones especiales y hasta catering, torta o alguna sorpresa gastronómica para los invitados al festejo virtual, sobre todo en los cumpleaños de quince o en aniversarios.

Claro que festejar el cumpleaños sólo con el núcleo familiar de forma presencial y con el resto a través de una aplicación requiere nuevas estrategias para poder emular los festejos prepandemia, en especial cuando el o la agasajada son pequeños niños que tuvieron que dejar de lado la fiestita a la que estaban acostumbrados.

“La ilusión de festejar no entiende de virus”, dice Rocío Ramón de Pipi Cucu en cada una de sus entregas. Hace papelería para eventos, siempre se encargó de “entregar el cumpleaños en una caja”, pero ahora es una de las protagonistas principales a la hora de organizar un festejo de zoomple. Su “deco” es esencial para darle un toque especial al festejo en cuarentena.

“Siempre entregué los cumpleaños en una caja, pero lo que hicimos ahora en la cuarentena es adaptarnos a las necesidades de ahora, las sorpresitas y esas cositas no van más y lo adaptamos a las necesidades básicas: invitaciones digitales , minipiñatas para uno o dos niños, cajitas de golosinas mini porque son solo para el niño y después banderín y demás para que se decore la casa”, contó ella sobre las propuestas para los zoomples.

Está todo pensado para que la gente no tenga que moverse de la casa. Tengo tres combos que son básicos. Uno es solo la deco, y hay un segundo y tercer combo que incluye pastelería. Me asocié con una chica que hace pastelería y ofrecemos la deco, la torta y demás como para que la gente tenga toda la solución. Lo que hice ahora fue incorporar velas, bengalas y globos”, detalló Rocío sobre sus kits que se pueden adquirir desde los 1400 pesos, aunque también hay propuestas individuales que pueden rondar los 800 pesos, y se pueden adaptar al bolsillo del cliente.

¿La demanda? “Fue buenísima”, señaló Rocío y agregó que “la demanda es mucha porque no queda otra que festejar en casa”. La cantidad de cumpleaños que Pipi Cucu realiza al mes se duplicó durante la cuarentena: “ahora estoy haciendo por mes 25/30 cumpleaños. Antes hacía 15 como mucho”.

No hay cumpleaños sin torta y tampoco hay zoomple sin tortas y, aunque sea, una velita para soplar y pedir los tres deseos. Es por eso que también las pastelerías mantuvieron sus ventas pese a la cuarentena. “Se redujeron los tamaños de lo que se vende y las tortas son un poco más simples de las que se vendían antes, pero estamos trabajando bien. Estamos trabajando muchos infantiles y las tortita para 10 personas salen un montón”, contó Cintia Lujan, pastelera que se dedica a vender sus productos, pero que también los ofrece en combos con otras emprendedoras para que el zoomple sea una fiesta y para que “no pase desapercibida una fecha tan importante”, tal como destacó la pastelera.

Cintia Ramón es organizadora de eventos y tenía planificadas fiestas para estos meses que, claramente, fueron suspendidas con la irrupción de la pandemia. Pero de la suspensión de los cumples de 15 surgió la idea de empezar a organizar cumples virtuales. “El primero que hice fue para un 15 que tenía programado. Hablé con la familia para hacerle algo a la chica. Le preparamos el cumple sorpresa, le llevamos a la cumpleañera la torta en una bandeja bien grande con cositas para comer, todo bien envuelto con un globo y un moño, y el papá eligió siete amigas y amigos, y a ellos se le llevó la misma torta en versión mini con la invitación para la videollamada por zoom”, recordó Cintia.


Los catering se reconvirtieron en medio de la pandemia


Ante la ausencia total de fiestas y eventos que requieren servicios de catering, la mayoría de ellos tuvieron que reconvertirse. La opción más elegida –y viable– fue la de armar diferentes opciones de menús para enviar a domicilio. Y en líneas generales, decidieron conservar su esencia.

“Para movernos económicamente se nos ocurrió hacer packs con nuestra comida y ofrecerlos una vez a la semana a nuestros clientes por redes sociales”, contó José de Chacrita la Luna, una quinta de eventos de Plottier. “No es una vianda de un solo menú sino que es un pack con varias cositas para compartir en familia”, agregó Verónica.

Y José cerró: “La idea es acercar las características de La Chacrita a la familia. Tratamos que tenga algunos secretitos que puedan sorprender”.

Los menús listos para comer en la comodidad de la casa se volvieron moneda corriente para consumir en familia o para regalar. Hay quienes se la jugaron y decidieron sumar los servicios de catering a domicilio como un anexo a los zoomples, claro que para eso es necesario contar con un buen presupuesto.

¿Cuánto sale un zoomple?

6.000
pesos cuesta el servicio completo con una torta, bocaditos y tres minitortas para invitados.
1.400
pesos es el valor un combo de decoración básico, pero completo.

1.900
pesos es el precio de una torta pequeña (para 10 personas) con buena decoración. Las “Drip cakes” son las más elegidas.
1.100
pesos vale un pack preparado especialmente para dos personas, de comida elaborada por un servicio de catering, con envío a domicilio.

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