¡La Renga vuelve a CABA! Los detalles de los tres shows en Huracán

La confirmación llega tras una semana de movida en redes, donde figuras como Andrés Ciro Martínez, Piti Fernández e incluso León Gieco pidieron al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que autorizara a La Renga a tocar en territorio porteño.

La espera terminó para los fanáticos de La Renga: la banda de Mataderos confirmó su regreso a la Ciudad de Buenos Aires con tres shows en el Estadio Huracán. Tras una intensa campaña en redes sociales, los recitales están programados para el sábado 28 de junio, el martes 1 de julio y el sábado 5 de julio.

La Renga vuelve a la ciudad de Buenos Aires: los detalles de los shows en el estadio de Huracán


Las entradas para los conciertos saldrán a la venta el miércoles 11 de junio a las 12 hs a través de la plataforma entradas.arteinfernal.com. Además, se habilitarán puntos de venta físicos en Arte Infernal y Museum (CABA), El Sabbath (Don Torcuato), La Daga (Rosario) y Edén (Córdoba), para quienes prefieran adquirirlas en persona.

La confirmación llega tras una semana de movida en redes, donde figuras como Andrés Ciro Martínez, Piti Fernández e incluso León Gieco pidieron al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que autorizara a La Renga a tocar en territorio porteño.

La presión dio sus frutos: en las últimas horas se destrabó la situación, y el “banquete” en el Ducó ya es una realidad, marcando el regreso oficial de la banda a CABA tras ocho años, desde su última presentación en el mismo estadio (sin contar su aparición sorpresa en el Vélez de Divididos).

¿Por qué La Renga no podía tocar en CABA?


La Renga enfrentó dificultades para tocar en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) durante varios años debido a una serie de trabas administrativas, políticas y logísticas que la banda y su entorno calificaron como actos de censura y discriminación.

  • Falta de Respuestas y Demoras Administrativas: La banda denunció en múltiples ocasiones que las autoridades porteñas no respondían a sus solicitudes para realizar shows en CABA. Por ejemplo, en 2012, La Renga expresó que, a pesar de presentar toda la documentación requerida, no recibían respuestas claras, lo que les hacía sentir que no tenían lugar en la ciudad, mientras otros eventos masivos sí eran permitidos.
  • Problemas con Permisos y Seguridad: Las autoridades solían argumentar preocupaciones relacionadas con la seguridad y el impacto de los recitales. En 2017, la Policía Federal rechazó un pedido para tocar en Huracán, citando razones como “impacto ambiental”, “venta de estupefacientes” o “baños colapsados”. Sin embargo, la banda y su productor, José Palazzo, afirmaron que estas excusas eran injustificadas, ya que La Renga había demostrado en otros recitales masivos, como los seis shows en Huracán en 2017, que podían organizarse sin problemas.
  • Supuesta Motivación Política: Algunos análisis y declaraciones sugieren que las trabas podrían estar relacionadas con una percepción de La Renga como un grupo opositor a ciertos sectores políticos, particularmente al gobierno porteño liderado por el PRO durante la gestión de Mauricio Macri y Jorge Macri. Su participación en eventos como el festival por los 30 años de la democracia en Plaza de Mayo en 2013, o su apoyo a causas como la de Santiago Maldonado en 2017, podrían haber contribuido a esta percepción.
  • Discriminación Cultural: Desde el entorno de la banda, se señaló que las autoridades parecían tener una postura discriminatoria hacia La Renga, posiblemente por su origen en el barrio de Mataderos y su estilo de rock barrial, en contraste con otros eventos culturales o internacionales que sí recibían autorización. En 2022, por ejemplo, la negativa del municipio de Vicente López para autorizar shows en Tecnópolis fue calificada por José Palazzo como un “acto intencional, discriminatorio y de censura”.
  • Complejidad en los Procesos de Habilitación: El proceso para obtener permisos en CABA y la provincia de Buenos Aires incluye dos etapas: una prefactibilidad inicial y una autorización final, que involucra la coordinación con la Policía para los operativos de seguridad. Esta última etapa fue un punto de conflicto recurrente, ya que las autoridades a menudo demoraban o denegaban la aprobación final, como ocurrió en San Pedro (2016) y Mar del Plata (2018).