El oficialismo apura el paso para licitar una nueva celda en el vertedero de Bariloche
El bloque oficialista forzó el dictamen y tiene el camino allanado para tratar en la próxima sesión el proyecto de ordenanza que Gennuso necesita, para llamar a licitación la obra que postergaría el cierre definitivo del basural a cielo abierto municipal.
El basural de Bariloche tiene un plazo de cierre a fin de año, por ordenanza. Archivo
En medio de un áspero debate político por la crisis que envuelve desde hace años la situación del basural, el gobierno municipal decidió avanzar con la licitación millonaria para abrir una nueva celda, que postergaría el cierre del complejo, como quedó establecido hace tres meses por ordenanza.
El bloque oficialista forzó este martes en la comisión de Gobierno y Legales el dictamen sobre el proyecto y lo llevará a la próxima sesión, donde tendría los votos asegurados para darle sanción.
Pero los bloques unipersonales Podemos, PUL y la concejal del Frente de Todos Julieta Wallace fustigaron una vez más el pliego de licitación porque significa dilatar el cierre del vertedero que debería formalizarse el próximo 4 de diciembre, según ese mismo cuerpo lo impuso mediante una ordenanza votada por unanimidad.
El intendente Gustavo Gennuso, como toda respuesta al emplazamiento, envió en enero pasado al Concejo la iniciativa para licitar la apertura de una nueva celda en el mismo y la realización de trabajos de remediación sobre el actual sitio de disposición final. Pero no avanzó en el reclamado “basurero regional”, que todas las partes reconocen como única alternativa.
Para el Gobierno es una mejora
Para el Ejecutivo la nueva celda en formato de “relleno sanitario” no es en los hechos un cierre pero sí una mejora cualitativa respecto de la operación de la basura “a cielo abierto” que existe hoy, con graves perjuicios ambientales para los vecinos.
El subsecretario de Planeamiento y Sustentabilidad Urbana, Claudio Romero, volvió a brindar detalles técnicos del proyecto, pero reconoció que la celda tendrá una vida útil de un año y “con esto no alcanza”. El costo de los trabajos, según el presupuesto incluido en el pliego, será de 723 millones de pesos.
Romero y otros representantes del Ejecutivo mantuvieron varias reuniones con los concejales en los últimos dos meses, pero no consiguieron precisar dónde y en qué plazos se constituirá el nuevo vertedero regional, como reclaman los vecinos. El subsecretario reconoció que los necesarios contactos con la provincia orientados a ese fin se mantienen en un nivel “informal”.
El concejal Pablo Chamatrópulos (Podemos) dijo que el tratamiento y disposición final de la basura “es uno de los problemas endémicos de la ciudad, irresuelto a lo largo de muchos años” y consideró que la campaña electoral en curso debería ser “la mejor oportunidad” para que los distintos candidatos “digan cómo van a resolver este tema”.
Advirtió que su bloque no facilitará una solución temporal “sin la garantía de iniciar el camino consolidado” hacia la relocalización.
También Julieta Wallace mantuvo una postura de abierta crítica hacia la propuesta del Gennuso. Subrayó que “el mismo Ejecutivo reconoce el alto grado de incerteza sobre el sitio de disposición final regional” y coincidió en no dar aval para ninguna solución intermedia “sin tener algo palpable y documentado: el lugar y la obra a desarrollar”. Dijo que sin ese agregado, “la solución es mentirosa”.
Reticencia de la provincia
Romero dijo una vez más que dentro del ejido no hay lugares posibles y que los sitios regionales identificados, en la zona de estepa, son al menos cinco, sin preferencia explícita por ninguno. A pesar de la insistencia de los opositores,
Carlos Sánchez (presidente del bloque oficialista) dijo que no pueden definir un lugar por ordenanza porque todos están en el departamento Pilcaniyeu y Bariloche no tiene potestad. Pero aclaró que “la voluntad del Ejecutivo y de este bloque es el cierre del vertedero”.
Wallace se quejó de que todos los compromisos son volátiles y que los candidatos en campaña evitan las precisiones. “Tuitean que se van a hacer cargo de algo, pero a la hora de la verdad no hay nada -afirmó-. La gente está muy enojada, cuando ve que hay tanta desidia y negligencia”.
Subrayó que el intendente Gennuso hizo “un aporte fundamental a este problema, porque desde 2015 hasta hoy la situación del basural empeoró”.
Consultada luego por este medio dijo que “claramente hacen esto para patear la pelota hacia adelante, sin importar la normativa provincial y nacional que prohíbe los sitios de disposición final en zonas urbanizadas”.
Ante las preguntas insistentes, Romero reconoció que no hay respuesta del gobierno provincial a la nota enviada hace casi tres meses por el municipio para reactivar la idea de un basurero regional. Dijo que las gestiones son a nivel de la secretaría de Ambiente, pero “siempre telefónico, no hay documentos”.
El concejal Gerardo Del Río (PUL) aludió al “miedo de los vecinos por no tener certidumbre frente a lo que viene”, mientras realizan periódicas movilizaciones y reclamos públicos para lograr la erradicación del vertedero.
Cuando parecía que el debate quedaba inconcluso y pasaba a la próxima semana, el concejal Sánchez precipitó el pedido de dictaminar el proyecto, con la idea de llevarlo a la sesión de este jueves.
Su voto fue el único a favor, Wallace y Chamatrópulos lo hicieron por la negativa y Del Río se abstuvo. Durante la reunión habían participado también los concejales Oscar Cárdenas (Bariloche por el Cambio) y Roxana Ferreyra (FdT disidente), pero se ausentaron antes de votar.
Wallace aprovechó para recordar que las juntas vecinales próximas al vertedero pidieron en forma expresa que el día que trate el proyecto de licitación el Concejo sesione en el gimnasio Newuenche u otro salón de la Pampa de Huenuleo, para facilitar la asistencia de los vecinos. Pero le advirtieron que esa decisión dependerá de la comisión Legislativa.
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