Quitan funciones al Senasa: en qué consiste la nueva desregulación de Federico Sturzenegger para las hortalizas
Se publicó en el Boletín Oficial bajo el decreto 312/25. La medida del gobierno nacional fue comunicada este lunes.
El funcionario afirmó que la medida colaborará a eliminar funciones "absurdas" del Estado.
El gobierno de Javier Milei derogó un decreto de 1935, que regulaba la tipificación, empacado y fiscalización de hortalizas frescas destinadas a la exportación. La medida se conoció este 12 de mayo a través de una publicación el Boletín Oficial. El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anunció que el Senasa próximamente solo se dedicará al control sanitario de los productos y no supervisará más el proceso de producción ni evaluará su calidad.
«A lo largo de los años al SENASA se le fue dando el rol de supervisar tres cosas: A. La calidad de los productos, B. El proceso productivo, y C. Actuar como policía sanitaria», indicó el funcionario.
Y afirmó: «En todo caso lo único que tiene que hacer es actuar como policía sanitaria, para evitar infecciones, plagas y garantizar un comercio internacional fluido».
La desregulación que anunció el gobierno respecto a las hortalizas
El primer paso del gobierno libertario en este aspecto fue derogar decretos antiguos de envasado frutícola a través del decreto 312/25. «Nos despeja el camino para emitir esta semana una serie de resoluciones que desregulan totalmente la producción de hortalizas«, sostuvo.
Además, anticipó que en los próximos meses continuarán «con el resto de las actividades progresivamente y sin pausa».
«Literalmente dejamos de molestar al productor en las cosas que el productor debe resolver por sí mismo y concentramos la tarea en donde hay un valor útil de la supervisión estatal», concluyó Sturzenegge.
Desde el gobierno de Javier Milei afirman que la decisión busca eliminar regulaciones que, según el Ejecutivo, han quedado obsoletas y generan trabas en la operatoria actual del sector hortícola.
El decreto derogado imponía exigencias sobre el embalaje y la habilitación de las plantas de origen, que ya no se ajustan a las prácticas comerciales ni a las normativas sanitarias modernas
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