Tragedia de Sol: la causa sigue en pie

El juez federal subrogante reactivó el expediente luego de que así lo ordenara la Cámara de Roca. Pero antes analiza si la acción penal se encuentra prescripta por el paso de los años. El avión se precipitó sobre la meseta rionegrina el 18 de mayo de 2011.

Cuando el 18 de mayo de 2011 a las 23:40 un avión Saab 340 de la aerolínea Sol se estrelló en el medio de la meseta, en la Región Sur, con 22 personas a bordo, comenzó el peregrinar de Juan Carlos Ruiz para saber qué ocurrió y quiénes son los responsables de la muerte de su hijo Juan Manuel.

Nueve años y cuatro meses después de aquella tragedia, las explicaciones no llegan y la Justifica Federal volvió a retomar días atrás la causa penal, luego de que el año pasado la Cámara Federal de Apelaciones de Roca revocara el sobreseimiento de los directivos de la aerolínea Danilo Pojmaevich, Horacio Angeli y Juan Alberto Nyffenegger (fallecido) y ordenara una nueva investigación.

Con un sabor amargo, Juan Carlos Ruiz –que es querellante en la causa, al igual que la viuda del piloto Marcela Bastit– escuchó la semana pasada vía Zoom una audiencia de ampliación testimonial de los peritos que intervinieron para investigar la caída del avión LV-CEJ, que había partido ese 18 de mayo desde Neuquén con destino a Comodoro Rivadavia, en el que murieron su hijo de 29 años y otras 21 personas, entre los que se encontraba el piloto Juan Raffo.

La audiencia virtual convocada por el juez federal subrogante de Bariloche Gustavo Zapata se realizó la semana pasada. Meses atrás el magistrado había hecho lugar a un planteo de la fiscalía para determinar si la acción penal se encuentra vigente o si prescribió, algo que la querella objetó, pero que aún se debe resolver.

La semana pasada testificaron los técnicos que realizaron el informe de la Junta de Investigaciones de la Aviación Civil, Alberto Rocchi, Carlos Sardi, Daniel Barafani y Augusto de Santis, y la perito oficial Fabiola Edith Miraval. No asistieron los defensores de los directivos de la compañía.

Para Ruiz y su abogada, los informes de los peritos coinciden en que el avión se estrelló por engelamiento pero además señalan que la aeronave no estaba habilitada para volar y la empresa Sol Líneas Aéreas no había analizado los riesgos de la ruta que atravesaba la meseta rionegrina.

La querella considera que el hecho debe ser tipificado como un delito doloso, contemplado en el artículo 190 del Código Penal para “cualquier acto que ponga en peligro la seguridad de una aeronave”.

Familiares de las víctimas. Foto: archivo

Nosotros no solo somos víctima de esta tragedia, sino también de la animosidad que vemos en este juzgado de querer cerrar la investigación”, lanzó Ruiz a RíO NEGRO. Señaló que su único objetivo es saber qué pasó en el siniestro en el que perdió la vida su hijo cuando viajaba en el vuelo 5428 de Sol, a trabajar a una petrolera en Comodoro Rivadavia.

Recordó que a fines de junio del 2019 la Cámara de Apelaciones revocó el fallo del juez Leonidas Moldes y ordenó reabrir la investigación. Con estas audiencias que reactivan la causa –aunque en primera instancia para determinar la excepción de prescripción–, Ruiz consideró “asombrosa” la intervención de la representante de la fiscalía que dijo “tener claro qué pasó con el avión y apuntó solo a la responsabilidad del piloto”, esgrimió el querellante.

La fiscal actúa con un papel de defensora de los intereses de los directivos de la empresa”, fustigó y no descartó pedir su apartamiento de la causa.

A su entender “hay un cúmulo de hechos en el contexto del accidente que no son responsabilidad absoluta del piloto”.  En este sentido señaló que el piloto Raffo a pesar de tener certificados de excelencia en su tarea, no había sido capacitado por la empresa para responder en situaciones de engelamiento. 

Para la abogada Barreto, “la Cámara pidió que se investigue y no se hizo nada hasta el momento”. Pidió una serie de pruebas para consolidar la teoría de la querella y la citación a indagatoria de los directivos de la compañía. También señaló que el avance la causa puede abrir una responsabilidad hacia funcionarios públicos de la Autoridad Nacional de Aviación Civil (ANAC).  


Un pedido para que no haya impunidad


Juan Carlos Ruiz y Marcela Bastit, viuda del piloto Juan Raffo, piden que la tragedia de Sol no quede impune.

Ambos se mantienen como querellantes en esta causa judicial que se inició en 2011 y encontraron en la decisión de la Cámara de Apelaciones de Roca de junio de 2019, que ordenó seguir investigando, una esperanza.

Pero ahora observan nuevas trabas del Juzgado Federal de Bariloche al que le exigen que “abandone el análisis parcial y sesgado de la causa” y que “restaure su imparcialidad, atienda a un abordaje integral del caso y determine de una vez por todas las responsabilidades que originaron y desencadenaron este fatal accidente”.

Calificaron además de “desidia, impunidad y falta de interés de parte de los que tienen la obligación de investigar”.

El lento vuelo de un caso fatal

2011
El 18 de mayo a las 23:40 se produce la tragedia, cerca de Los Menucos.

2012
El juez Leonidas Moldes dicta la falta de mérito de los directivos de la empresa.

2019
La Cámara Federal de Roca revoca el sobreseimiento y ordena seguir investigando.


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