Un paseo por la Manzana Histórica de Viedma
Un proyecto busca poner en valor el recorrido por la plaza Misiones Salesianas y los edificios anexos construidos en 1890 que invitan a viajar al pasado.
La construcción comenzó en 1890 y fue declarado Monumento Histórico Nacional. Fotos Marcelo Ochoa
Una interesante iniciativa se puso en marcha en Viedma con la puesta en valor del sector denominado Manzana Histórica, que comprende la plaza seca Misiones Salesianas y sus edificios anexos que tienen una historia muy importante. También se prevé revalorizar y poner en funcionamiento el Museo Salesiano Monseñor Cagliero.
Todo ello permitirá preservar el patrimonio histórico de la Provincia de Río Negro y de la Patagonia, para custodiar el legado de la Comunidad Salesiana, que adquiere significativa importancia. El presidente de la Asociación de Hoteleros y Gastronómicos de la Zona Atlántica, Julio Pondal, expuso la iniciativa ante el intendente de la capital rionegrina, Pedro Pesatti, quien expresó las intenciones de potenciar a Viedma como la capital histórica de la Patagonia y, en ese sentido, tiene también otros proyectos para concretarlo.
Los empresarios hoteleros comenzaron a coordinar con el jefe comunal un proyecto para habilitar ese paseo. Tienen por meta que la mencionada plaza comience a ser tenida en cuenta como un lugar de esparcimiento cultural turístico.
Para mostrar la importancia de la propuesta, invitaron a recorrer el lugar a la ministra de Turismo, Cultura y Deportes provincial, Martha Vélez, como a otras autoridades rionegrinas y lograr así cristalizar la iniciativa.
Señalaron que la puesta en valor y funcionamiento del museo histórico religioso Monseñor Cagliero, permitirá visualizar el trabajo de los salesianos y es necesaria la restauración de uno de los únicos testimonios edilicios en pie, que atesoran una gran cantidad de obras de arte en sus paredes.
El edificio fue construido a partir de 1890 y fue declarado Monumento Histórico Nacional. Entre aquellas paredes se tejió una parte de la historia de la región. Sin ir más lejos, en una de las aulas se ese monumental lugar, estudió el beato Ceferino Namuncurá. El sitio guarda a su vez información documental y objetos del beato Artémides Zatti, el recordado enfermero que residió durante año en Viedma.
El proyecto de los empresarios fue elaborado con la intervención de profesionales de la arquitectura y fue entregado al intendente para iniciarlo a la brevedad.
En el mismo lugar, también funciona el museo gardeliano Lisandro Segovia, donde se guarda una rica historia con objetos y discos del zorzal criollo Carlos Gardel. Con las mejoras detalladas el lugar se constituirá en un atractivo turístico cultural de gran valor, pudiendo ser visitada por los turistas.
Por Andrea Isabel y Marín Julio Isidro Pérez, licenciada y experto en Turismo
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