Un profesor de música aceptó haber abusado sexualmente a una alumna

Alberto Di Modica aceptó este jueves haber abusado a una niña que concurría a su domicilio para tomar clases particulares de guitarra.

El caso fue denunciado por la víctima en 2016, pero los hechos ocurrieron entre 1994 y 2005, cuando era menor de edad.

Durante el juicio abreviado se acordó una condena por abuso sexual simple agravado contra Di Modica.

Al imputado se le atribuye haber realizado tocamientos a una niña que concurría a su domicilio para tomar clases particulares de guitarra, durante varios años. Los hechos se encuadraron como abuso sexual simple, agravado por haber sido cometido por el encargado de la educación de la víctima.

En la audiencia mostraron su conformidad la Fiscalía, la víctima -representada por la Querella- y la Defensa. Ahora resta al juez evaluar si se dieron todas las condiciones de legalidad para que la pena acordada por las partes se confirme.

El profesor de música le pidió perdón a la víctima por los abusos

El acuerdo de juicio Abreviado surgió tras el consentimiento de la víctima y la plena aceptación de las partes. La modalidad requiere que el imputado acepte su culpabilidad, la calificación legal y la pena. En este caso, 3 años de prisión en suspenso, pedido público de disculpas -que se concretó en la propia audiencia-, fijar domicilio, seguir las reglas de Instituto de Asistencia a Presos y Liberados, cumplir con la prohibición de acercamiento de 200 metros y de contacto con la víctima directa o indirectamente, mantener entrevistas psicológicas para evaluar si requiere de tratamiento. Además, se impone la inhabilitación perpetua para dar clases de guitarra a menores y una reparación simbólica a la víctima de 100 mil pesos.

Para la confección del acuerdo se tuvo en cuenta la falta de antecedentes penales y evitar la revictimización de la denunciante que conllevaría la realización de un juicio con debate oral y público.

La audiencia fue encabezada por el juez Marcelo Chironi. Estuvieron presentes el fiscal Juan Pedro Puntel; los abogados defensores del imputado, el acusado y el abogado querellante, junto a la víctima.