Argentina, comercio internacional, Freud, Potemkin y demás
CLAUDIO LOSER (*) Infolatam
La clase media argentina, en la medida en que se lo puede permitir, es usuaria devota de la psicología para ayudar a resolver sus conflictos personales y familiares. Más aun, la Argentina es uno de los pocos lugares donde se mantiene vigente el psicoanálisis como escuela central para resolver complejos conflictos internos. El mundo aprendió muchísimo de Freud, pero la práctica ha avanzado hacia métodos más pragmáticos, enfocados en encontrar soluciones operativas y que no llevan a la permanente dependencia del paciente con el analista. Lamentablemente, esto es un reflejo de que los argentinos viven aferrados a un culto al pasado difícilmente existente en el resto de América Latina, aun incluyendo la magnífica celebración del Día de los Muertos en México. Así se habla como si estuvieran presentes Rosas y Sarmiento, Carlos Gardel, el mismo Freud, sin entrar a mencionar los personajes de los últimos sesenta años en la política nacional. La actitud del gobierno argentino en el reciente encuentro entre América Latina y Europa en Santiago de Chile ilustra ese punto. En circunstancias en que el mundo busca expandir el comercio internacional, tal como lo ilustra el esfuerzo de Chile, Colombia, México y Perú para consolidar su alianza del Pacífico, la Argentina se encierra en una discusión proteccionista incluso dentro del Mercosur. Para ello, el discurso oficial utiliza viejos argumentos, esgrimidos en algún momento por la Cepal, aunque el mismo Prebisch y la institución subsecuentemente los abandonaron. Ciertamente, importantes países utilizan descaradamente técnicas proteccionistas a nivel de comercio, inversión e incluso de financiamiento. Estados Unidos, la Unión Europea, Japón, Rusia, China, India y Brasil son claros y tristes ejemplos de irracionalidad de uno u otro tipo. Pero aun así no alcanzan el grado de desordenado y arbitrario encierro comercial que la Argentina aplica hoy, con altos costos para sus habitantes, especialmente los menos favorecidos. Tal como en el pasado, la Argentina castiga así a sus pocas áreas innovadoras y dinámicas, como el sector exportador agrícola y el energético. Un sistema cambiario distorsionado y una moneda sobrevaluada completan una realidad repetida muchas veces en el pasado, como si fuese una continua sesión psicoanalítica preocupada de revisitar presuntos procesos internos y sin ver la realidad que la rodea. (El autor de esta nota debe aclarar aquí que su tesis doctoral, completada hace más de cuarenta años, analizaba los tóxicos efectos adversos de una protección arbitraria aplicada a la industria entre las décadas del 30 y del 60. Nada nuevo bajo el sol). A esto se agrega la más alta inflación en la región, también una repetición histórica, solamente que encubierta desde hace ya cinco años. Utiliza así la Argentina la metodología de otro personaje del pasado, el príncipe Grigori Potemkin, ministro de Catalina la Grande de Rusia que, dice la leyenda, construía pueblos ficticios para impresionar a su jefa y hacer creer que había progreso en el país. Quizás el elemento más nuevo en la situación actual es el proceso de cesación de pagos y subsiguiente resolución unilateral de la deuda, aunque allí también hay antecedentes. Se trata de Felipe II de España, que hace 550 años inventó el default, aunque entonces se llegó a una solución consensuada. La inspiración de las medidas es histórica, pero el daño es presente y con serias implicaciones para un país que cada vez más se pierde en la gloria de su pasado. Quizás por todas estas contradicciones internas se buscan soluciones en un permanente autoanálisis psicoanalítico, elegante pero inefectivo. Los jóvenes podrían mirar hacia adelante, a través del cristal de Facebook y Twitter. Pero el país político se encierra en sí mismo y los insta a analizar antiguos e irrelevantes conflictos bajo la tutela intelectual de personajes ya fallecidos y de ideas que, aunque fascinantes, no son operativas. (*) Doctor en Economía. Exdirector del FMI para el hemisferio occidental
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