Encontró desde el gaviotín ártico hasta el atajacaminos en Patagonia
Es de Neuquén y observa la fauna silvestre desde hace 18 años. Ya publicó 30 artículos y recorre el país para conocer más.
Mauro Bianchini vive Neuquén capital y es ingeniero civil y es naturalista aficionado. Cuenta con más de 30 artículos publicados en revistas científicas de la Argentina y Brasil.
“El gusto y el aprecio por la naturaleza me llevó a querer recorrer más lugares, y la curiosidad me hizo indagar y buscar respuestas en libros, artículos y consultar a expertos”, contó Bianchini a Diario RÍO NEGRO.
Describió 15 especies nuevas para Neuquén. Entre otras, Águila pescadora, Atajacaminos tijera, Gaviotín ártico, Lechuzón orejudo, Golondrina tijerita, Tacuarita azul, Vuelvepiedras, Gaviotín sudamericano, Burlisto pico canela, y hasta un marsupial.
En algunos casos el naturalista encontró la evidencia presencial. En otros casos, detectó la evidencia de la reproducción de la especie en la provincia. También publicó sobre tanto la evidencia presencial como reproductiva.

El admirable gaviotín ártico
Uno de los aportes más significativos de Bianchini es el registro del Gaviotín ártico en tierra neuquina.
Esa especie de ave se reproduce durante la primavera y el verano boreales en la región ártica de Europa, Asia, las islas Aleutianas y América del Norte. Luego migra hacia la Antártida, y acumula en promedio 40.000 kilómetros al año.
El naturalista se llevó una sorpresa al encontrar un ejemplar de gaviotín en una lagunita de la localidad de Santo Domingo, sobre la ruta nacional 22, cerca de Zapala. Fue el primer registro continental de esa especie en el país, y el hallazgo permitió confirmar que el ave sigue una ruta migratoria que conecta los océanos Pacífico y Atlántico, a través de la cordillera de los Andes, pero a la vez une el Polo Norte con el Polo Sur.
Dónde está la golondrina tijerita
Otros trabajos se han enfocado en la golondrina tijerita. “Es una especie que viene expandiendo de manera sostenida su rango geográfico reproductivo en América del Sur”, resaltó.
Bianchini publicó las primeras evidencias reproductivas para Río Negro, Neuquén y Mendoza, que están entre las nueve provincias donde esa golondrina ha sido hallada. También encontró las evidencias más australes en Chubut.
“Un trabajo que me exigió mucha atención de muestreo fue el seguimiento reproductivo del Atajacaminos tijera. Es una especie que pasa increíblemente inadvertida. Durante el día permanece en el suelo o en ramas bajas, estática y sin emitir voces”, dijo. Sus pichones al nacer se desplazan y cada vez más lejos y son difíciles de ver. “El tiempo insumido en cada relevamiento de campo se dilataba enormemente por desplazarme con mucha cautela ante el temor de pisarlos. Por fortuna eso no sucedió”, detalló.

Durante los relevamientos de campo, Bianchini a veces viaja miles de kilómetros en busca de evidencia de la presencia o situaciones relacionadas con la reproducción de los animales que estudia. A veces, ha recibido ataques o amenazas como los espolonazos de teros o se ha encontrado con lechucitas vizcacheras en una actitud desafiante en Neuquén, que le marcaban el terreno. “Estaban cuidando la cueva con sus crías adentro”, detalló.
Sus trabajos tienen impactos directos y positivos en el conocimiento, y promueven herramientas para el manejo y conservación de la biodiversidad.

Los remedios ocultos en la biodiversidad
Mauro Bianchini vive Neuquén capital y es ingeniero civil y es naturalista aficionado. Cuenta con más de 30 artículos publicados en revistas científicas de la Argentina y Brasil.
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