Filarmónica de Río Negro: Una orquesta joven y con un toque cipoleño

Objetivo. La Filarmónica busca la manera de poder llevar su música a cada rincón rionegrino.

Gentileza Ricardo poclava

Cipolletti cuenta en su haber, con varios hijos pródigos de la música. En su mayoría, viajaron por el mundo, capacitándose en renombradas universidades, tocando en festivales y formando parte de ensambles de otras naciones. Este es el caso de Martín Fraile, actual director y fundador de la Orquesta Filarmónica de Río Negro. Junto a él, más de 50 músicos de toda la región recorren las localidades de la provincia brindando conciertos.

En el año 2013, en una reunión que Martín mantenía con un diputado, buscando patrocinio para sus proyectos, conoció casualmente al exministro de Educación, Marcelo Mango. “En ese entonces yo pensaba que por ahí venía la mano”, comentó y destacó que el funcionario “escuchó atentamente lo que hablábamos. Al otro día me llamó y más adelante nos vinieron a ver con una propuesta”. Desde allí comenzó a gestarse la posibilidad de que la provincia tuviese un ensamble fijo, y se materializó poco tiempo después, cuando ya se había conformado el programa de orquestas y coros del Bicentenario, en el año 2014. “Para la reunión del Consejo Federal de Educación del 2013 nos pidieron que armemos un orquesta con coros para recibir a los ministros de cada provincia”, relató y agregó que “surgió entonces la demanda de organizar algo provincial”.

La Filarmónica rionegrina está actualmente compuesta por 55 músicos. Comenzó a funcionar con aportes del Ministerio de Turismo, Cultura y Deportes, la Secretaría General de la Gobernación y la Legislatura.

Con 36 conciertos planificados para este año, el grupo busca alcanzar la meta de 40 funciones para, de esa forma, “recorrer cada localidad de Río Negro”, según aseguró el director. La casa que les da asilo en cada gira es el Círculo Italiano de Villa Regina, que junto al municipio ofrecieron el espacio mediante un convenio. Desde allí recorren una vez por mes, al menos cuatro ciudades del territorio.

Con Diego Díaz, de la Fundación Cofradía de Bariloche, Martín organizó una orquesta con miembros de Bariloche y del Alto Valle, y en algunas de sus presentaciones, parte de los gastos fueron financiados por varios municipios, como por ejemplo Allen, Catriel o Cipolletti. “Vimos que ese formato podía funcionar, yo lo había usufructuado en Estados Unidos. Allá tocaba en localidades pequeñas, que no tenían fondos para sostener a una orquesta estable, entonces los municipios se asociaban y lo resolvían así. Es la misma forma que actualmente está funcionando nuestra orquesta”, precisó el músico.

Martín Fraile, director de la Orquesta Filarmónica de Río Negro.

Martín nació en Buenos Aires, pero desde pequeño vive en Cipolletti. “Si me preguntan, yo digo que soy cipoleño”, confesó entre risas. En medio de una juventud enclavada en el barrio San Pablo, cursó la primaria en la escuela 53 y la secundaria en el CEM 17, mientras tomaba clases particulares de violín y participaba en la Orquesta Municipal de Neuquén. Pasó por el club San Pablo y el Marabunta, pero “en un momento, el que era el director de la orquesta de Neuquén en ese entonces me dijo que tenía que elegir entre el deporte o la música porque me rompía las manos. Fueron algunos años, pero al final elegí la música”, bromeó.

Luego de un breve período en el que estudió guitarra en el Instituto Universitario Patagónico de las Artes (IUPA), se radicó en La Plata para licenciarse en violín, dirección coral y dirección orquestal, en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata. En el 2003, en medio de aquella intensa crisis que sacudió al país, obtuvo una beca y viajo a Stanford, California, en Estados Unidos. Allí obtuvo una maestría en Artes y vivió acompañado de su pareja durante casi una década. “Empecé a trabajar como profesor en la universidad y además participaba en festivales en Europa y Asia”, recordó. Luego del nacimiento de sus hijos, retornó al país junto a su familia durante el 2012. Sólo transcurriría un año para que comenzara a forjar lo que hoy es la Orquesta Filarmónica de Río Negro.

Su director, Martín Fraile, criado en Cipolletti, cuenta que quieren alcanzar la meta de 40 conciertos, para lograr recorrer toda la provincia.