Crimen en Cipolletti: el acusado estaba con domiciliaria y habría disparado desde su casa
La justicia le dictó prisión preventiva por cuatro meses. Estará 30 días en una comisaría. El hecho ocurrió el sábado a la tarde.
El hecho ocurrió el sábado en el barrio Don Bosco. (gentileza)
El hombre que hoy fue imputado por el crimen en Cipolletti, el sábado a la tarde, está condenado y estaba con prisión domiciliaria. Se trata de Francisco Javier Britos quien cumple una condena de cuatro años por varios delitos, entre ellos resistencia a un procedimiento policial.
La jueza de Garantías Agustina Bagniole, hizo lugar al pedido de la fiscalía y le dictó prisión preventiva por cuatro meses. Estará un mes en una comisaría y luego se evaluará si vuelve al penal.
El hecho investigado ocurrió el sábado alrededor de las 18 cuando la víctima, Héctor Fernández, circulaba en una motocicleta en cercanías de Venezuela al 1200 de Cipolletti.
En esas circunstancias, «el acusado desde la vereda de su domicilio habría disparado en varias oportunidades contra el fallecido«, indicaron desde el Ministerio Público Fiscal.
La calificación legal es homicidio agravado por el uso de arma de fuego y portación ilegal de arma, delito que prevé penas que comienzan desde los diez años y ocho meses de cárcel.
Entre las principales evidencias, el fiscal Martín Pezzetta mencionó distintos testimonios que sustentan su teoría del caso mencionando que existió un conflicto previo entre los dos involucrados en el hecho.
«Alrededor de las 16 se habría dado una primera discusión entre la víctima y el imputado, pero una hora más tarde, un grupo de personas se habría hecho presente en la casa del acusado produciendo importantes daños en dos vehículos estacionados en el frente de la vivienda. El crimen tendría como posible motivación este conflicto previo», informaron desde la fiscalía.
Condena previa
Britos fue condenado en un juicio abreviado en abril. Como estaba herido de bala recibió prisión domiciliaria por seis meses con pulsera electrónica. Aparentemente el dispositivo no falló, sino que el joven efectuó los disparos desde su propia casa en el barrio Don Bosco.
Se sabe que fue condenado en un juicio abreviado con acuerdo de la defensa, la fiscalia y la querella. El joven protagonizó un disturbio en la vía pública, la policía lo intentó detener, él se subió a su auto y arrancó. En medio arrastró dos metros a una bici policía. La mujer se constituyó en querellante y recibió un resarcimiento económico de 30 mil pesos por las lesiones leves. El auto fue decomisado.
Como el hombre estaba herido de bala al momento del juicio abreviado las partes acordaron que los primeros seis meses de la condena se cumplirían en la modalidad de prisión domiciliaria por razones de salud aunque con control de pulsera electrónica. Luego pasaría a un penal. Extraoficialmente se supo que no se reportaron fallas en el sistema de monitoreo al 911.
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