Definen los criterios para la ayuda a escuelas privadas de Río Negro
La ministra de Educación dijo que tendrán en cuenta varios factores, entre ellos matrícula y cantidad de docentes.
Familias acusan la imposibilidad de pagar la cuota de las escuelas privadas. Archivo
El Ministerio de Educación define los criterios para distribuir el fondo de 10 millones de pesos que dispuso el Gobierno rionegrino para auxiliar a las escuelas de gestión privadas que no reciben subsidios y que acusan una severa crisis por la alta morosidad y la caída de la matrícula.
La ayuda llegará a 30 escuelas que tienen 69 unidades educativas, es decir que se contempla como una unidad cada uno de los niveles de enseñanza que dicte (inicial, primario y secundario).
La ministra de Educación, Mercedes Jara Tracchia, dijo a RÍO NEGRO que para definir el monto para cada escuela “se tendrá en cuenta la matrícula, la cantidad de docentes y a qué tipo de población asiste” el establecimiento educativo.
Otro criterio que se considerará es diferenciar entre quienes recibieron algún tipo de ayuda estatal, como el ATP nacional para pagar los sueldos, y quedarán afuera de este aporte las escuelas que ya reciben subsidios de la provincia.
El Gobierno solo anticipó que el aporte se entregará en dos cuotas, pero se desconoce de cuánto será cada una, monto que variará según los criterios que se definan en conjunto con la Asociación de Colegios Privados.
Durante esta pandemia, la provincia también auxilió a los jardines maternales, con un aporte de 150.000 pesos para cada una de las 43 instituciones registradas en todo Río Negro, que se otorgó en julio, y una segunda ayuda que se concedió de manera directa en septiembre en función del personal.
El subsidio a las escuelas privadas ahora llega con el objetivo de “sostener la actividad y especialmente los puestos laborales del sector ante la fuerte crisis generada por la pandemia de COVID-19”, informó el Gobierno.
Bariloche es la ciudad que tiene más escuelas privadas y estudiantes nucleados por el sistema. Un 30% de los estudiantes de la ciudad asiste a alguno de los establecimientos privados, que acusa con la pandemia un índice de morosidad del 40% y teme una fuerte caída de la matrícula para el ciclo lectivo 2021.
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