El gobierno no quiere a Arroyo Salgado en la causa de Olivos

Lo manifestó el viceministro de Justicia. “No es lo más adecuado” que la magistrada, viuda de Alberto Nisman, tome la investigación por el cumpleaños de Fabiola con invitados “si lo que se espera es un fallo imparcial”.

El Olivos-Gate sigue en el limbo judicial, a la espera de que se defina el juzgado que lleve la investigación que tiene como protagonistas al presidente Alberto Fernández y a su pareja Fabiola Yáñez.

El Gobierno aprovechó el impasse para rechazar la posibilidad de que el expediente termine en manos de la jueza Sandra Arroyo Salgado porque “no es lo más adecuado si lo que se espera es un fallo imparcial”.

Fue el viceministro de Justicia Juan Martín Mena quien puso en duda la idoneidad de la integrante del juzgado de San Isidro y viuda de Alberto Nisman, quien apareció muerto en su departamento en 2015 tras denunciar a Cristina Fernández. “Con nuestro espacio político no garantiza objetividad ni imparcialidad porque eso lo ha demostrado su conducta en los últimos años”, dijo el funcionario.

Mena se pronunció sobre una situación aún irresuelta, porque no se determinó en dónde quedará el expediente. Por lo pronto, el juez federal Sebastián Casanello declaró la “incompetencia” de su juzgado “en razón del territorio” para avanzar con la investigación en la que se deberá determinar si el Presidente y personas de su entorno íntimo violaron en julio del año pasado las restricciones sanitarias contra el coronavirus vigentes al participar de una cena en la Quinta de Olivos para celebrar el cumpleaños de Yáñez.

Por una cuestión de jurisdicción, Casanello envió la causa a los tribunales federales de San Isidro. Podría quedar en manos de Arroyo Salgado, quien ya tramita una denuncia por los mismos hechos. “La verdad no corresponde el cambio de jurisdicción por varios motivos, pero el primero es por una cuestión de que el Código Procesal y la ley procesal marca muy claramente, que es una cuestión de garantizar justicia”, opinó Mena.

En declaraciones a Radio 10, el vice de Justicia agregó que “cuando hay conexión entre dos jurisdicciones, históricamente y legalmente se resuelve por la jurisdicción que previno, la que avanzó más en la investigación, para no obstaculizar la causa”.

Pero Mena puso en tela de juicio a la viuda de Nisman. “Nadie puede hacerse el zonzo con eso. Es conocido que con nuestro espacio político, mas allá de las personas que puedan ser investigadas en esta causa, no garantiza ningún tipo de objetividad ni imparcialidad porque eso lo ha demostrado su propia conducta en los últimos años”.

Arroyo Salgado se convirtió en la cabeza de las multitudinarias marchas para denunciar que Nisman no se suicidó, sino que lo mataron tras haber denunciado a la entonces presidenta Cristina Kirchner por tratar de encubrir a los iraníes acusados por el atentado contra la AMIA mediante la firma del memorándum con ese país.

La viuda de Nisman ya blanqueó su interés por ponerse al frente del Olivos-Gate, que impactó de manera muy negativa en la imagen del presidente Fernández. Incluso la vicepresidenta Cristina Kirchner le reclamó que “ponga orden”. La semana pasada la jueza de San Isidro le solicitó al juez Casanello, a través del fiscal Ramiro González, que “arbitre los medios necesarios” para que ella pueda acceder al expediente de manera digital. Antes de ese pedido, Arroyo Salgado impulsó un planteo similar a través del fiscal de San Isidro Federico Iuspa.


Adherido a los criterios de
Journalism Trust Initiative
Nuestras directrices editoriales
<span>Adherido a los criterios de <br><strong>Journalism Trust Initiative</strong></span>

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios