Buscan que la ley de Hidrógeno Verde sea un incentivo para invertir y que a la vez sea flexible
La asesora legal de la secretaría de Energía, Verónica Tito explicó que el hidrógeno es una industria nueva para el país, por lo que el proyecto de ley busca ser un marco adaptable. Confirmó que está listo para presentarse en el Congreso.
El Foro se está llevando a cabo en la ciudad de Bariloche. Foto: gentileza.
Según confirmó la secretaria de Energía de la Nación, el proyecto de ley de hidrógeno ya está listo para presentarse en el Congreso. «Se puso mucho énfasis en dos pilares: generar herramientas e incentivo para el inversor privado y un marco flexible y adaptable porque es una industria nueva para nosotros«, indicó Verónica Tita, asesora legal de la secretaría de Energía en el Foro Global de Hidrógeno Verde.
Tita participó del panel «Legislación y Contratos para el Hidrógeno Verde» junto con el director nacional de Vectores Productivos Estratégicos de la secretaría, Gonzalo Montiel y el consultor senior asociado en la Consultora Caldén, Ramiro Rodríguez.
El proyecto de ley está «técnicamente terminado», aseguró Tita. Será un régimen de promoción del hidrógeno de bajas emisiones con una vigencia de 30 años. «La idea es ir fijando bases solidas para que las empresas puedan venir a invertir al país», resaltó. El proyecto de ley contempla el hidrógeno verde (de fuentes renovables), azul (de gas) y rosa (de energía nuclear).
Estos fueron elegidos por ser de bajas emisiones y por la posibilidad de desarrollarlos con los recursos en el país: «en cuanto al rosa, Argentina tiene una importante trayectoria en materia de energía nuclear. El azul también, siempre que cuente con tecnología de almacenamiento de carbono. El objetivo a largo plazo es que solo sea verde. Los incentivos son siempre mayores para el hidrógeno verde«, marcó Tita.
La referente explicó que «se trató de trabajar sobre las medidas restrictivas a nivel cambiario. Tratamos de dotar a la ley de herramientas diversas que vayan facilitando la inversión privada». Ante el contexto electoral, aseguró que el proyecto de ley saldrá este año ya que «es una cuestión que está alejada de las elecciones. Es una política de Estado«.
Por su parte, Montiel remarcó que están trabajando con pilares estratégicos como «la ley de promoción de inversiones, la evaluación ambiental estratégica, que va a ser la primera que se haga en torno al hidrógeno en el país y la ley de promoción del hidrógeno».
El referente expresó que la estrategia nacional del hidrógeno se basa en cuatro áreas: producción, desarrollo tecnológico y formación; política regulatoria y ambiental; infraestructura; y comercio e inversiones en el desarrollo del mercado internacional.
Esta se está elaborando a partir de la Mesa Intersectorial del Hidrógeno, del que participan 7 ministerios, 6 gobiernos provinciales y el consorcio H2Ar y cámaras comerciales de distintos países. «Estamos trabajando en un análisis de 14 países líderes. Estamos desgranando sus acciones para darle factibilidad técnica. Vamos a tener que empezar por proyectos pilotos», indicó.
«El mundo va a demandar cada vez más hidrógeno. En Río Negro y Tierra del Fuego miran claramente al futuro y están valorizados en nuestra agenda. Buscamos no sólo tener la ley sino tener una estrategia nacional. Es parte del contrato social en torno al hidrógeno: tiene que continuar», marcó. En esta línea, indicó que «el puerto de Bahía Blanca tiene un plan al 2040«. Es el primero del país en unirse a la Coalición Global de Puertos de Hidrógeno.
En Río Negro y Tierra del Fuego miran claramente al futuro y están valorizados en nuestra agenda»
Director nacional de Vectores Productivos Estratégicos de la secretaría, Gonzalo Montiel
A su turno, Rodríguez detalló la situación en la materia de los distintos países en la región: «Chile es líder en energías renovables no convencionales seguido por Brasil. Ambas representan una referencia para el país. Sin embargo, la disponibilidad de recursos renovables no es suficiente para concretar los proyectos. El desafío principal es la falta de marcos regulatorios que ofrezcan estabilidad y estimulen la inversión privada».
En comparación, «en Chile hay un plan de acción proyectado al 2040: una hoja de ruta que muestra un despliegue para el desarrollo de la industria, una política a largo plazo. Brasil estimula la transición y la hoja de ruta se desarrolla en un consorcio central del Estado y consultorías. En el caso de Argentina, desarrolla la ley de promoción, su hoja de ruta y la estrategia; la mesa intersectorial y el consorio H2Ar», enumeró.
El consorcio estudió cómo es el estado de evolución del hidrógeno en los países de Latinoamérica. Los cuatro países mas desarrollados son Chile, Costa Rica, Brasil y Argentina. Las naciones están en diferentes situaciones.
En particular, Argentina «ha tenido inconvenientes en lo económico, lo que ha repercutido en el interés de los stakeholders«. Sin embargo, el país ha sido pionero en los primeros pasos para la producción de hidrógeno. Hoy tiene «un potencial muy destacable y ahora estamos en otra situación. El desarrollo del ecosistema del hidrógeno ha mejorado un 60%«, indicó Rodríguez.
«En el 1996 se fundó la Asociación Argentina del Hidrógeno y la revista del Hidrógeno. Luego hubo un primer congreso llamado Hidrógeno y Fuentes Sustentables de Energía (Hyfusen) bianual hasta el 2015. En 2005 se inauguró la planta de hidrógeno de Pico Truncado, la primera de Latinoamérica«, resaltó.
Tanto Chile como Brasil han avanzado en diferentes aspectos. Ambos muestran grandes progresos, lo que le permitirá a Argentina avanzar y también aprender de las decisiones que toman los países vecinos, explicó el referente. Para el desarrollo, «hay que incentivar toda la cadena de valor. Polos productivos regionales y definir marcos regulatorios«, cerró.
Comentarios