Búsqueda de Luciana Muñoz: la delicada situación del único detenido por el caso
Es una pieza clave para la investigación, acaso la única pista firme que puede conducir al esclarecimiento del caso. Pero al mismo tiempo se convirtió en un callejón sin salida. Este lunes hubo una audiencia clave.
Avilez está con prisión preventiva en el caso Luciana Muñoz. Pronto podría ir a juicio. (Cecilia Maletti)
Carlos Maximiliano Avilez es una pieza clave en la búsqueda de Luciana Muñoz, la joven que fue vista por última vez en Neuquén desde el 13 de julio del 2024. Fue su novio, y para la fiscalía sabe mucho más de lo que dice. Fue sospechoso, testigo, pasó a ser acusado de falso testimonio, estuvo con detención domiciliaria, incumplió, le dictaron prisión preventiva, y ahora está próximo a ir a juicio oral. Este lunes a través de su defensa intentó una estrategia para sacar ventaja de su situación. No lo logró, pero tampoco se fue con las manos vacías.
El fiscal del caso, Andrés Azar, pidió que fijen fecha a la audiencia de control de acusación en la causa por falso testimonio. Es la instancia en la que se discute la prueba que se utilizará en el juicio en su contra. Será, posiblemente, a fin de mes.
El defensor de Avilez, Sebastián Perazzoli, solicitó por su parte que le permitan ver el legajo en el que están todas las pruebas reunidas por la desaparición de Luciana Muñoz. «Mi cliente está imputado por haber mentido en ese legajo. Le allanaron la casa, le cotejaron su ADN con manchas hemáticas. Hay sospechas sobre la participación de Avilez en la desaparición de Luciana, por eso queremos ver el expediente», argumentó este lunes en una audiencia ante el juez Juan Manuel Kees.
Perazzoli trató de meter a la fiscalía en una encerrona: «si Avilez es sospechoso de la desaparición, no puede ser procesado por falso testimonio», planteó.
El fiscal Azar retrucó que «no se trata de si es sospechoso o no. No es conveniente que Avilez, ni nadie, tenga acceso a los detalles de esa investigación». La misma postura tuvo la querellante Verónica Zabala.
¿Es sospechoso de la desaparición o no?
El juez Juan Manuel Kees fue directo. Le preguntó al fiscal: «¿Avilez está siendo investigado sí o no? Porque si dentro de dos meses le quieren formular cargos por la desaparición, pueden surgir inconvenientes».
«No está siendo investigado», respondió Azar sin titubeos. «Hubo medidas de investigación, como las manchas de sangre que encontramos en su casa, dudas que tuvimos en cuenta, pero desde que lo acusamos de falso testimonio dejó de ser objeto de prueba por la desaparición».
En voz un tono más bajo agregó: «no significa que mañana no se lo pueda incriminar».
El juez comprendió lo que se dijo en la audiencia, y más aún lo que no se dijo. Por eso resolvió negarle el acceso al expediente principal. Sería un riesgo que Avilez esté al tanto de todas las líneas de investigación del caso Luciana.
Avilez es una pieza clave, sabe más de lo que dice sobre el paradero de la joven, pero por ahora solo hay pruebas para imputarle falso testimonio.
Así y todo, es la única pista, tenue, renuente a colaborar, que tiene la fiscalía.
Carlos Maximiliano Avilez es una pieza clave en la búsqueda de Luciana Muñoz, la joven que fue vista por última vez en Neuquén desde el 13 de julio del 2024. Fue su novio, y para la fiscalía sabe mucho más de lo que dice. Fue sospechoso, testigo, pasó a ser acusado de falso testimonio, estuvo con detención domiciliaria, incumplió, le dictaron prisión preventiva, y ahora está próximo a ir a juicio oral. Este lunes a través de su defensa intentó una estrategia para sacar ventaja de su situación. No lo logró, pero tampoco se fue con las manos vacías.
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