Facundo otra vez víctima del maltrato estatal: viajó para una audiencia que se suspendió

El joven quedó con gravísimas secuelas como consecuencia de un ataque policial en Neuquén. Dos funcionarias que debían comparecer faltaron y la audiencia no se hizo.

El destrato de los organismos del Estado hacia la ciudadanía puede adquirir muchos formatos. Este viernes a la mañana se conoció uno de ellos, y quienes padecieron la revictimización fueron Facundo Agüero y su familia.

Estaba programada a las 10:30 en la Ciudad Judicial de Neuquén una audiencia para discutir la posible incorporación al régimen de salidas transitorias del policía Pablo Escudero, condenado a siete años de prisión efectiva más 10 de inhabilitación.

Facundo está en silla de ruedas producto del violento ataque que sufrió por parte de los policías. Padece una enfermedad mental y corporal incurable, solo puede mover sus ojos y tiene un leve dominio de su cabeza. Vive al cuidado de su madre, Adelina Rivas, en Picún Leufú.

Ambos recorrieron los 140 kilómetros que separan ambas localidades para estar presentes en la audiencia. Pero las dos técnicas citadas a declarar para presentar un informe que indicaría si Escudero está o no en condiciones de obtener las salidas transitorias, faltaron «por razones de trabajo».

El funcionario de la defensoría pública de Ejecución, Juan Galarraga, informó que le avisaron el jueves a la tarde, sin dar tiempo a reprogramar ni avisar a la víctima. Pidió que les recuerden que ser testigo es una carga pública.

La jueza Raquel Gass, quien dirigió la audiencia, indicó que les pedirá un informe por escrito para que justifiquen su ausencia, y le hizo saber a la familia que la próxima audiencia la podrán seguir por zoom. Pero ellos quieren estar presentes, como estuvieron siempre.


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