“La falta de respeto por la vida es la causa de las muertes en las rutas”
La muerte de su padre, su marido, su hija y su hijo en un incidente vial, le dejaron una huella de dolor imposible de mitigar.
Para Rocío Butín, la única sobreviviente de esa tragedía ocurrida hace ocho años, esas pérdidas fueron causales de una “discapacidad emocional, no volvés a estar entero”.
La mujer es sobreviviente de una tragedia vial, que ocurrió el 10 de octubre del 2010. La fecha se marcó a fuego en su memoria: el 10 del 10 del 10 perdió a toda su familia en un incidente de tránsito sobre la Ruta Nacional 22, cuando llegaba a General Roca. Hoy asegura que su optimismo le permitió seguir adelante, pero leer sobre siniestros, muertes y estadísticas la lleva hasta el pasado.
Transcurrieron ocho años de esa tragedia y el diagnóstico que ofrece es el mismo: “La falta de respeto por la vida”. El incidente que le costó su familia fue por exceso de velocidad de quien venía por el carril contrario. Ella asegura que el otro auto “iba a 150 kilómetros por hora. Mordió la banquina, se cruzó de carril y terminó arriba de nuestro auto”. Su padre falleció en el acto, su esposo y dos hijos en los días posteriores por traumatismos encéfalo craneanos. El otro conductor también perdió la vida.
La infraestructura vial debería ser declarada en emergencia nacional por la cantidad de siniestros que existen”.
Rocío Butín sobre el estado de los caminos que cruzan la región.
“Dos responsables”
El último fin de semana le dejó un mal sabor en la boca, porque hubo incontables hecho viales que dejaron cuatro muertes como saldo y un puñado de heridos graves en toda la Provincia.
Rocío manifestó que hay dos responsables de esta situación: “Por un lado el Estado, que no garantizar el buen estado de los caminos y en el otro extremo a los conductores que no respetan las reglas, manejan alcoholizados, usando celulares, viajan con exceso de velocidad o realizando maniobras indebidas”.
Fueron varios los factores que, se presume, determinaron las fatalidades ocurridas entre el viernes y el domingo pasados.
Después de la tragedia
“El tema principal es la indiferencia, no hay respeto a la vida y la gente corre para llegar al trabajo, a sus vacaciones. Se relativiza lo que es más importante que es la vida. Yo lo veo así porque lo sufrí en el peor de los escenario”, reflexionó Rocío. Aún recuerda a las personas que perdió y por momentos los llora.
En dos semanas cumple 41 años y ahora se ubica en otro plano. Le costó tiempo retomar los hilos de su vida: en 2011 se recibió de comunicadora social y cuatro años después volvió a trabajar.
Hoy se desempeña en una de las ventanillas del hospital Castro Rendón. Se casó y fue madre nuevamente. A la distancia, ve las cosas desde otra perspectiva, se aferra a las ganas de vivir y su voz castiga a los “que no respetan la vida, ni la propia ni la de otros”.
Los tres recuerdos luego del incidente vial
Roció Butín solo recuerda tres momentos del siniestro que le costó su familia.
El primero fue el 10 de octubre a las 18:30. Contestó un mensaje de texto, levantó la vista y vio que el otro vehículo se cruzaba de carril apuntando directamente hacia su auto.
Un muerto y seis heridos en terrible choque
La segunda impresión fue ese mismo día en el sanatorio Juan XXIII, en una resonancia magnética. La acompañaba su suegra. Rocío preguntó ¿cómo están los nenes? y la respuesta fue “todo esta bien”.Allí comprendió que “todo estaba mal”.
La última imágen presente fue el 12 de octubre en la terapia intensiva de la clínica, cuando fallecieron sus dos hijos.Mientras que su marido perdió la vida tres días después.
- 01-02: Tomás Lincopam (14). Vuelco en Chos Malal, sobre Ruta 40.
- 02-03: Genaro Daniel Porcellini (64). Cboque frontal en Ruta 22, en Plaza Huincul.
- 02-03: José Alberto Hazeldine (35). Fue atropellado en Centenario, sobre la Ruta provincial 67.
- 03-03: Eloy Navarro Saldía (14). Vuelco en Junín de los Andes, sobre la Ruta 40.
Comentarios