La ley contra la especulación hizo caer la cifra de incendios
Prohíbe cambiar el uso del suelo en bosques nativos, áreas naturales y humedales consumidos por las llamas. Este año se registró sólo un 10% de los focos que se sufrieron en 2020. Cabandié advirtió que el tendido eléctrico en Chubut es un riesgo.
Los incendios en la Comarca Andina del verano pasado consumieron bosques y viviendas. Foto: archivo
Las hectáreas afectadas por incendios forestales en el país se redujeron drásticamente en el último año, según indicó el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, que atribuyó esta situación a mayores tareas de prevención y a la ley que impulsó Máximo Kirchner que prohíbe el cambio de uso del suelo de las tierras afectadas por el fuego.
“Se quemaron 1.100.000 hectáreas en el 2020, hoy faltan tres meses y medio para que termine el año y estamos en el 10%”, dijo Cabandié en Bariloche y señaló que a pesar de esta mejora importante en la afectación de tierras por incendios, hubo este año muchas personas afectadas con la pérdida de sus viviendas, como ocurrió en Lago Puelo, El Hoyo y El Bolsón en el verano.
Cabandié mencionó dos factores que influyeron en la disminución del índice de tierras arrasadas por el fuego. Por un lado, que se realizaron mayores tareas de prevención, con provincias que incorporaron sistemas propios de manejo del fuego, y por otro lado, por la vigencia de la ley que se aprobó en diciembre pasado. “Todo eso redundó en la baja afectación de hectáreas por incendios forestales, pero no tenemos que quedarnos con eso porque hubo una sequía muy importante y hay mucho material combustible, lo que hay que hacer es trabajar de forma preventiva”, afirmó el ministro.
Se quemaron 1.100.000 hectáreas en el 2020, hoy faltan tres meses y medio para que termine el año y estamos en el 10%”,
Juan Cabandié, ministro de Ambiente del gobierno nacional.
La ley no distingue los incendios de origen intencional o accidental, y establece la prohibición de modificar el uso del suelo por 60 años, en el caso de que se afecten bosques nativos, áreas naturales y humedales; y por 30 años para realizar emprendimientos inmobiliarios, agricultura extensiva que modifique el territorio o cualquier otra actividad agrícola distinta a la realizada antes del incendio.
La premisa de esta normativa era apuntar a la especulación inmobiliaria y agrícola que estaría detrás de muchos incendios forestales.
El titular de la cartera ambiental remarcó, en su intervención en la asamblea de la Red de Municipios frente al Cambio Climático, que el 95% de los incendios se producen por acción humana.
Años atrás, en una fecha similar, el entonces ministro de Ambiente Sergio Bergman dijo en Bariloche que había que rezar para que no haya incendios forestales en el verano. Anteayer se lo recordaron a Cabandié y respondió: “Creo que hay que tomar acciones, hay que prevenir”.
El ministro estuvo semanas atrás en la Comarca Andina, que fue severamente afectada el verano pasado por incendios que destruyeron unas 500 viviendas y 13.00 hectáreas. Recordó que ese desastre fue consecuencia de una deficiencia en el tendido eléctrico y advirtió que “si el Estado no intervine podría volver a ocurrir que los cables empiecen a chispear y generen un incendio”.
Cabandié mencionó que hay mejoras en el servicio de lucha contra el fuego con la incorporación a la planta del Estado de 350 brigadistas y la adquisición de equipamiento.
Señaló además que incrementó un 500% el presupuesto nacional para el manejo del fuego y se prevé a futuro la compra de camiones y medios aéreos para el combate del fuego, ya que actualmente se deben alquilar aviones y helicópteros hidrantes a privados o utilizar recursos del Ejército.
Comentarios