¿Mentiras o error? Los vecinos de «Aguada Cecilio» que vuelven al país complican al gobierno de Río Negro
Desde el Ministerio de Salud admitieron fallas en el seguimiento a las personas que regresan a la provincia. "Hay casos que no sabemos dónde buscarlos", reconocieron.
El contagiado entró por Ezeiza con dos test negativos, como establece la normativa actual.
En Río Negro no sólo es un desafío demorar lo máximo posible la llegada de la variante Delta de coronavirus. El Ministerio de Salud también lucha hoy contra un problema imprevisto: las mentiras o irregularidades en el sistema que debería permitir ubicar a quienes viajaron al exterior, para hacerles un seguimiento y certificar que no se contagiaron de covid-19.
La situación fue admitida por el titular de la cartera sanitaria de la provincia, Fabián Zgaib, quien se mostró sorprendido por la repetición de domicilios fijados en Aguada Cecilio en los registros oficiales que reciben desde la Dirección Nacional de Migraciones.
“Nos llama la atención, porque es imposible que tanta gente de ese lugar viaje al exterior”, sostuvo el ministro en diálogo con periodistas de RÍO NEGRO.
Las anomalías fueron advertidas hace varios días, pero hasta el momento no está claro si se trata de una conducta intencional de turistas que dieron datos falsos cuando regresaron al país o todo es producto de una falla en el sistema informático, teniendo en cuenta que esa comisión de fomento es la primera referencia que aparece si se ordena alfabéticamente a todas las comunidades de la provincia.
Lo concreto es que el trabajo clave que debe realizar el personal del sistema de salud rionegrino se complicó durante los últimos días.
“Estamos siguiendo a los que llegan desde hace 45 días. Desde cada hospital los seguimos como si fuera un contacto estrecho. Pero tenemos un problema. Nos pasan los registros y tenemos un montón (de personas) con los datos cambiados”, describió Zgaib.
El ministro reconoció que “hay casos que no sabemos dónde buscarlos, porque los datos que nos da Migraciones no coinciden”.
Zgaib también mencionó que las dificultades para interrumpir la cadena de transmisión del virus no se limitan sólo a estos casos de rionegrinos que viajaron al exterior.
“El año pasado, por cada positivo, teníamos unos 20 contactos estrechos. Ahora tenemos dos o tres. Parece que la gente no estuvo con nadie”, ironizó el funcionario.
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