Mujer y nena murieron cerca de Chimpay

CHIMPAY (AVM).- Dos vidas segadas trágicamente fue el saldo del terrible accidente ocurrido ayer a la tarde en el kilómetro 1055 de la Ruta Nacional 22, a nueve kilómetros de esta localidad, en dirección al Alto Valle.

Una mujer y una niña de corta edad, dos de los cinco ocupantes que iban en uno de los tres rodados involucrados murieron instantáneamente.

De acuerdo a información proporcionada por el subcomisario Mario Roberto Ortiz, a cargo del operativo, el hecho ocurrió cerca de las 17.30 cuando dos camiones chocaron entre sí y luego uno de ellos impactó al Fiat 147 en el que viajaban cinco personas desde Neuquén, posiblemente rumbo a Las Grutas como destino final.

El camión semiplayo Mercedes Benz, dominio GUZ 711, -del cual la policía pidió reserva de la identidad del conductor- viajaba rumbo al Alto Valle y por motivos que se tratan de establecer impactó en la punta de la cabina del camión cisterna Mercedes Benz 1684, dominio ENB 734, conducido por Orlando Rubén Azcona, 50 años y oriundo de la localidad bonaerense de Coronel Dorrego, que viajaba desde Neuquén hacia La Pampa.

Azcona maniobró en pos de evitar el golpe pero el semiplayo terminó impactando en el tren trasero izquierdo del acoplado perteneciente al camión de combustible, que terminó a cien metros sobre su banquina y sin consecuencias físicas para el conductor. El descontrolado camión siguió su carrera y terminó chocando al Fiat 147, dominio ATH 685, conducido por Guadalupe Gómez, 27 años, con domicilio en Neuquén.

Como consecuencia del fortísimo choque, la mujer falleció instantáneamente y con ella una nena de unos 4 ó 5 años de la que no se supo el parentesco.

Junto a las víctimas fatales viajaban María Agustina Ceballos, 20 años, que sufrió lesiones graves; Nahuel Gómez (quien iba al lado de la conductora), mayor de edad, con lesiones leves; y Tamara Harilur, 27 años, también con lesiones leves, todos oriundos de Neuquén pero sin poder establecer la relación de parentesco entre ellos.

Los lesionados fueron derivados a un centro asistencial del Alto Valle. Los heridos debieron esperar la llegada de los bomberos de Chimpay, dado que habían quedado atrapados entre los hierros retorcidos del irreconocible Fiat 147.

Cerca de las 21, el tránsito se habilitaba esporádicamente por una mano para descongestionar las larguísimas filas que se habían formado en ambas direcciones.

Al cierre de esta edición, aún trabajaba personal de la Brigada de Criminalística en el lugar.