Los aumentos de tarifas reinstalan el interés por la eficiencia energética en Bariloche
La caída de subsidios dispuesta por el gobierno nacional repercutirá en los bolsillos y obligará a extremar cuidados en el consumo, aseguran los operadores.
La construcción con criterios de eficiencia energética es clave para evitar derroches.
Los incrementos en la tarifa eléctrica que impactarán de lleno a partir de la próxima factura generó alertas en la CEB de Bariloche respecto de la conducta que asumirán los usuarios y ya existen planes para promover criterios de ahorro energético, con el fin de evitar niveles de consumo que resulten impagables, y que generen una mayor morosidad.
Lo mismo ocurre con el gas y otros combustibles, agravado por la escasez, que impide a miles de familias acceder a una conexión de gas natural. En relación con este aspecto puntual, el Observatorio por el Derecho a la Ciudad de Bariloche comenzó a promover prácticas de construcción que permitan ahorrar energía.
El arquitecto y docente Norberto Rodríguez, referente del Observatorio, dijo que esa tendencia está mucho más instalada en otros países y la Argentina registra un considerable atraso en la materia. Pero entendió que la caída de los subsidios y el aumento de tarifas, por encima de la inflación promedio, obligará a considerar más seriamente esas alternativas.
El presidente de la Cooperativa de Electricidad, Carlos Aristegui, dijo que habrá “incrementos fuertes” en el costo domiciliario de la energía a partir de este mes. En esa empresa esperan un efecto “parecido al que ocurrió en la pandemia”, cuando bajó la cobrabilidad promedio no tanto por las tarifas sino por la parálisis económica y la caída del ingreso de las familias.
. En esa empresa esperan un efecto “parecido al que ocurrió en la pandemia”, cuando bajó la cobrabilidad promedio no tanto por las tarifas sino por la parálisis económica y la caída del ingreso de las familias.
Según un detalle que aportó Aristegui, para un consumo estándar de 250 Kw/h por mes, con impuestos al margen, una factura que hasta febrero era de 14.501 pesos pasará a 22.086 pesos. Y la progresión ascendente no se detendrá, según está previsto en la política tarifaria y de subsidios impuesta por el gobierno nacional.
La tasa de cobrabilidad de la CEB en febrero fue del 95,9%, pero bajaría al 92%, según las proyecciones, cuando la histórica es de 93,4%.
“Veremos qué se puede hacer, porque el problema es parecido al que tuvimos en la pandemia -afirmó Aristegui-. La idea es evitar que el asociado caiga en endeudamientos muy grandes. Es posible que al principio la cobrabilidad baje de modo importante. Aunque dependerá mucho de la categoría”.
Dijo que la CEB tiene decidido iniciar campañas para promover el uso eficiente de la energía, como ya hizo otras veces, con consejos para el recambio de lámparas por las de bajo consumo o el empleo acotado de planchas, lavarropas, bombas y otros artefactos.
Aristegui reconoció que en las tomas y asentamientos, donde proliferan las viviendas “enganchadas” a la red -sin medidor individual- ese plan queda desbaratado. Porque el usuario no paga lo que consume y la CEB se lo factura al Instituto Municipal de Tierras y Viviendas. Según Aristegui, durante el gobierno del exintendente Gustavo Gennuso habían llegado a un acuerdo de compensación y el municipio comenzó a saldar lo adeudado, pero con la nueva gestión de Walter Cortés, ya no pagaron las cuentas.
Aristegui admitió que la deuda del Instituto se engrosará con rapidez porque son cuentas mensuales “millonarias” y no existe el aliciente el ahorro para las familias que se benefician de ese esquema, y que suelen tener todos sus artefactos hogareños a electricidad, incluidas cocinas, estufas y calefones.
Evitar el derroche en edificios y complejos turísticos
El arquitecto Rodríguez alertó también sobre el poco interés que despierta en el municipio el tema de la eficiencia energética. Recordó que “hace cinco años existe una ordenanza” que exige condiciones de aislamiento especial en nuevas construcciones de más de 250 metros cuadrados, “pero nunca se reglamentó”.
Desde el observatorio brindaron días atrás una charla para difundir conocimiento, técnicas y materiales para el ahorro energético en edificios. También abordan el tema en su canal de youtube https://www.youtube.com/live/GxiPRRncA6U?si=Pz8dgsA_1I6rcJuk.
Rodríguez dijo que la regla municipal para construcciones de más de 250 m2 deja afuera a las viviendas unifamiliares promedios “pero sí se puede aplicar en edificios y complejos de cabañas, que en muchos casos son construidas por inversores que no las van a habitar, entonces no les interesa”.
Señaló que los materiales evolucionan todo el tiempo y “hoy hay paneles súper aislantes que son 10 veces mejores que una pared de ladrillos”. Señaló que si la construcción en esa modalidad es un poco más cara, “se recupera en menos de un año con lo que está costando la electricidad o el gas”, sumado al beneficio colectivo de que “alcanzará para más gente”.
Esto último lo dijo en referencia a las restricciones impuestas por la empresa Camuzzi, que desde hace casi dos años no otorga nuevas conexiones en Bariloche y la región, a la espera de obras de compresión que dependen del gobierno nacional.
Rodríguez entendió que el empleo de tecnologías más eficientes para el uso de la energía debería ser una política pública y que el nuevo escenario de tarifas altas va a reflotar forzosamente ese debate.
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