Las pericias impiden acusar a un hombre por violencia de género en Bariloche
El sujeto fue denunciado por una mujer por secuestro, agresiones y abuso sexual. Está internado en el área de Salud Mental del hospital y hay dos informes contradictorios sobre su estado.
El caso de la mujer que denunció haber estado privada de su libertad durante 48 horas, en una vivienda del barrio Vivero de Bariloche, y haber sufrido abusos sexuales aún no se esclarece. Los dos informes periciales que se expusieron ayer ante el juez de garantías Juan Pablo Laurence muestran conclusiones contrapuestas, en relación a la salud mental del hombre sospechado.
Fuentes judiciales indicaron que un informe de la psiquiatra forense del Poder Judicial, Verónica Martínez, concluye que el hombre no está en condiciones mentales para enfrentar un proceso penal.
Sin embargo, otro informe pericial del área de Salud Mental del hospital Ramón Carrillo sostiene lo contrario.
Por eso, el fiscal Martín Govetto ayer no pudo formular cargos contra el hombre sospechado de haber privado supuestamente de su libertad a la mujer desde el 17 hasta el 19 de noviembre pasado, en su domicilio del barrio Vivero.
Las fuentes explicaron que, a raíz de los informes contradictores, el fiscal y el defensor oficial Marcos Miguel acordaron, con el aval del juez, una prórroga hasta el miércoles próximo de la internación del hombre en el área de Salud Mental del hospital de Bariloche, con custodia policial.
El juez no admitió el criterio del departamento de Salud Mental del hospital que recomendaba la externación del paciente. Las fuentes contaron que la fiscalía y la defensa pedirán informes a otros organismos para sumar otros puntos de vista en relación al estado de salud del sospechoso.
Destacaron que la mujer se encuentra internada en el hospital local, fuera de peligro, y en plena recuperación.
Según la información preliminar que manejan los investigadores, la mujer conoció la madrugada del 17 de noviembre pasado al hombre, cuando circulaban por la calle. El hombre la invitó presuntamente a su casa y la mujer aceptó. En la vivienda tomaron bebidas alcohólicas y a la mañana siguiente la mujer intentó irse y el sospechoso la retuvo contra su voluntad.
En la comisaría 28 conocieron el caso por el llamado de una vecina que había denunciado que escuchaba gritos de una mujer y golpes procedentes de una vivienda cercana.
Policías se presentaron alrededor de las 14 del 19 de noviembre en el domicilio señalado en la denuncia. Los policías llamaron a la puerta. No salió nadie. Sin embargo, escucharon a una mujer que pedía auxilio. Por eso, resolvieron entrar al patio de la vivienda y lograron comunicarse con la persona que solicitaba ayuda desde el interior del domicilio.
Como seguían escuchando gritos de la mujer, los policías trataron de entrar a la casa, pero la puerta estaba cerrada con llave. En ese momento, un hombre abrió la puerta y la mujer salió corriendo de la vivienda hacia el exterior.
La mujer denunció que el dueño de la vivienda la tenía encerrada hacía dos días en esa vivienda, y que había sufrido golpes y abusos sexuales.
Ante el dramático relato, los policías arrestaron al hombre y trasladaron a la mujer en una ambulancia hasta el hospital Ramón Carrillo de Bariloche, donde activaron el protocolo médico para los casos de abusos e internaron a la víctima.
Al día siguiente, se hizo la audiencia de control de detención del sospechoso, que compareció asistido por la defensora oficial Blanca Alderete. El fiscal del caso César Lanfranchi pretendía imputar al hombre por varios delitos. Sin embargo, la defensora oficial pidió al juez que el hombre sea sometido a pericias para establecer si comprendía la criminalidad de los hechos que se le pretendía atribuir antes de que avanzaran con la audiencia de formulación de cargos, relataron las fuentes judiciales a Río Negro. El fiscal no se opuso.
Por eso, el juez autorizó que especialistas del cuerpo médico forense del Poder Judicial hagan una pericia psiquiátrica al sospechoso para determinar su estado de salud mental. Y dispuso que el hombre sea internado en el área de Salud Mental del hospital local, con custodia policial.
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