Senillosa demarcó su ejido, el más grande de la provincia de Neuquén con 142 mil hectáreas
La localidad puso hitos en los límites de su ejido a los efectos de marcar el territorio que le pertenece con límites en Challacó, El Chocón y el los lagos Barreales y Mari Menuco.
La intendenta Patricia Fernández puso hitos para marcar los límites que tiene su localidad. (Prensa Municipalidad de Senillosa)
Después de 20 años, la localidad que tiene el ejido más grande de la provincia demarcó su propiedad, justo el día en el que se aprobó una ampliación de la cantidad de tierras que tiene la ciudad más poblada: Neuquén capital.
En efecto, la intendenta de Senillosa, Patricia Fernández, hizo su propio acto fundacional en la localidad y colocó hitos en los puntos extremos para marcar su territorio en las 142.000 hectáreas que tiene con costa del río Neuquén y ribera de los lagos Los Barreales y Mari Menuco.
Según indicó la comuna de Senillosa, en la jornada de este jueves, Fernández, acompañada de vecinos e integrantes de comisiones vecinales presentaron los tótems que delimitan el ejido de Senillosa.
Estos emblemas se encuentran en el kilómetro 1294 de la Ruta Nacional 22, y en el kilómetro 1284 de la Ruta Nacional 237.
Las construcciones están diseñados en 3D apreciándose desde cualquier punto de vista con un mensaje de «Bienvenida o Buen Viaje» más un código QR que al escanearlo se obtiene información relevante y turística de la ciudad.
Tienen 3,60 metros de alto y 1,80 de ancho, están construidos con metal en chapa y letras corpórea en una base de hormigón con anclaje metálico.
Fernández manifestó que «la finalidad es la demarcación clara del ejido local, por lo que en esta primera etapa comprenden éstos dos, y en breve se estarán colocando en Los Barreales y en julio próximo se prevé la colocación del cartel indicador en el sector delimitado por Plottier».
En el año 2002 por la Ley 2.405, la Municipalidad de Senillosa amplió su ejido a una superficie de ciento cuarenta y dos mil hectáreas (142.000 ha.).
En un artículo de la ley se indicó que el municipio instrumentara los medios para el amojonamiento de su ejido, en los sectores que considere necesario y conveniente.
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