Ruca Choroi tiene su escuela secundaria multicultural y bilingüe
Es el tercer colegio con esta currícula en la provincia. Se inauguraron tres aulas y un playón iluminado. Las clases seguirán dictándose a distancia por la pandemia.
En 2019 la escuela tuvo sus primeros 30 egresados entre jóvenes y adultos. Foto: Gentileza.
En Ruca Choroi, la semana pasada, se inauguró el edificio de la escuela secundaria. Podría haber sido un acto más, con todas las autoridades presentes, y pasar como un anuncio que solo le interesa a quienes viven en la localidad. Pero no, esas paredes guardan un sentimiento especial porque cada una es un refuerzo a la identidad mapuche, conteniendo el proyecto de escuela multicultural y bilingüe que es el CPEM 93.
Mientras los estudiantes de una de los pocos lugares de Neuquén que no tienen casos activos de coronavirus continúan con sus clases en sus casas (cursan el ciclo septiembre-mayo), tres flamantes aulas nuevas los esperan.
La vicepresidenta del Consejo Provincial de Educación (CPE), Ruth Flusch, resaltó el rol preponderante que tuvieron las comunidades mapuche de la zona en la construcción del edificio. Contó que, previamente, mantuvieron muchos “encuentros y escuchas”.
Eso quedó reflejado en las palabras del lonco de la comunidad, Hugo Lican: “Este sueño se empezó a pensar hace muchos años y nos hubiera gustado celebrar con los alumnos y todo el equipo de docentes y auxiliares, pero nos atraviesa la pandemia”, de todos modos “es un día que quedará en la memoria de todos nosotros”.
Quien encabezó el acto de inauguración del edificio fue el gobernador, Omar Gutiérrez, que destacó que “la obra ha respetado la identidad local, con materiales de la zona, y forma parte de la gran revolución deportiva y cultural.” Nuevamente, el concepto de identidad vuelve a marcar a esta escuela.
Hasta el momento, son solo tres las secundarias multiculturales en la provincia. Además del CPEM 93, están el 79 de Lonco Luan y el 86 de Costa de Malleo. Ruca Choroi, tuvo sus primeros egresados en 2019. Fueron 22 jóvenes que cursaron una modalidad de cinco años y ocho adultos, que completaron tres años de estudio.
Actualmente, la matricula es de 148 estudiantes (92 jóvenes y 56 adultos). La continuidad no solo del estudio sin asistir a la escuela, sino del proyecto multicultural y bilingüe tuvo su experiencia única en estos meses.
A diferencia de los estudiantes que no tenían conexión a internet y recibían los cuadernillos de actividades que diseñó Nación, en Ruca Choroi crearon los propios. Para esto, fueron clave las kimeltucefe.
Las kimeltucefe están a cargo de talleres como lengua y cultura mapuche, platería, música, cerámica y artesanía. “No se trata de cargos designados de un listado, sino que pertenecen a las comunidades”, explicó Flusch. Esto significaba que las mismas docentes viven con sus estudiantes, no surgen de otros lugares, lo que facilitó no solo la adaptación de los contenidos a la realidad pandémica, sino también un mejor seguimiento de los trayectos educativos y la posibilidad de continuar con el dictado de dichos talleres.
“Fue un trabajo muy situado, muy territorial”, valoró la funcionaria.
A pesar de las buenas experiencias y de vincularse en sus comunidades, la vicepresidenta del CPE reconoció que los estudiantes también tienen ganas de volver a la escuela para socializar. Sin embargo, la vuelta a la presencialidad es un proceso complejo que debe andarse de manera cuidadosa y todo el sistema educativo debe tener el visto bueno, teniendo en cuenta las condiciones de Salud, para poder retornar a las aulas. Mientras tanto, las aulas nuevas y el playón iluminado seguirán expectantes a la espera de su verdadera inauguración, con la comunidad escolar recorriéndolos.
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