Vuelve la atención del laboratorio en el Castro Rendón de Neuquén, pero no saben hasta cuándo
El laboratorio informó que la falta de insumos impidió realizar extracciones de sangre. Llegaron guantes, pero no saben cuanto van a durar.
Apuñalaron a una comerciante en un intento de robo en Neuquén (Foto: archivo Matías Subat)
El hospital de mayor complejidad de la región volvió a sufrir la falta de insumos afectando directamente a los pacientes. Esta vez, los trabajadores del Castro Rendón de Neuquén comunicaron que el abastecimiento de guantes se vio afectado y debieron suspender la extracción de sangre ayer. Hoy llegaron algunos insumos y se retomó la tarea, pero no saben hasta cuándo.
Este miércoles, la técnica de laboratorio, Norma Albornoz, informó a Diario RIO NEGRO que se retomó la extracción de sangre en el laboratorio del Castro Rendón, tras la llegada de guantes, aunque no saben hasta cuándo.
«Nos trajeron dos cajas de guantes S y M que cada una contiene mil guantes, pero no sabemos hasta cuándo nos van a durar». expuso Albornoz. Por esto, aclaró que se está trabajando de manera habitual, «pero no sabemos hasta cuando».
El reclamo y la suspensión fue por la falta de guantes y otros insumos, y la técnica, detalló a Am550 la situación. «Estamos a falta de guantes, una de las primeras normas de bioseguridad que tenemos como técnicos en el laboratorio», expuso a Am550 la trabajadora Norma Albornoz. Los trabajadores atraviesan la falta de guantes hace un tiempo y comunicaron que la única solución que les dan son guantes tamaño L o XXL.
«Las compras las hacen, nos dicen que el problema es que no hay guantes, sino nos suelen traer guantes de nitrilo y de vinilo, que es un guante sumamente grueso y no podemos palpar y ubicar la vena», explicó.
La falta del insumo, además de perjudicar al paciente, puede perjudicar también a los trabajadores. «Nosotros podemos ser vectores de distintas infecciones que haya acá en el hospital», indicó Abornoz.
Al mismo tiempo, los trabajadores del hospital pegaron una lista de elementos que faltan en la puerta del laboratorio, entre ellos tubos y reactivos. «Nos dan un stock pequeño, para un día o dos, y después otra vez tenemos que ver a ver de dónde sacamos para poder solucionar en el momento», detalló la técnica.
Albornoz explicó que «desde la dirección del hospital dice que es la subsecretaría quien debe comprar y la subsecretaría dice que es la dirección». «Nosotros estamos en el medio, pero sabemos que el más perjudicado es el paciente», manifestó.
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