Uso razonable

NITRÓGENO. En un terreno de 15.000 metros cuadrados (hectárea y media) sembrado con festuca en otoño, a mediados de diciembre se observaron manchas de color verde intenso entre un contexto más pálido, lo que evidenciaba un desequilibrio de nitrógeno. En esa fecha se aplicó un bolsa de úrea de 50 kilos (nitrógeno al 40%), o sea alrededor de 3,5 gramos por metro cuadrado. El resultado de esta fertilización se comenzó a observar a los 15 días de la aplicación y su efecto duró hasta la fecha, en que el césped está haciendo descender la savia para protegerse del frío y acumula esas reservas en las raíces. Si lo trasladamos a nuestros jardines significaría -empíricamente- que en un césped de 10 x 10 metros (100 metros cuadrados), alcanzaría con 35 a 40 gramos en una fertilización primaveral o de verano. POTASIO. Fertilizante químico interesante en otoño, ya que según la bibliogafía aumenta la resistencia a heladas de los tejidos vegetales e interviene en la economía del agua dentro de la planta. El fertilizante más mencionado es el Nitrofoska, que tiene distintos porcentajes de potasio y según ellos será la cantidad a distribuir por esa misma superficie de 100 metros cuadrados, pero esas dosis irían desde los 60 a 100 gramos, aunque comercialmente se esté hablando de hasta 2 kilos. No existiría el peligro de contaminación de freática, porque quedaría retenido en el suelo. DOSIFICACIÓN. El problema que enfrentamos es la dosificación, que evidentemente es muy difícil de hacer distribuyendo los granos o sales a mano, sino que deberemos colgar una bolsita de lienzo en una cisterna para que, tarde o temprano, el total vaya al césped, o diluirlo en agua y distribuirlo con regadera. Saque usted la cuenta de lo que acostumbra a agregar por temporada y tendrá la respuesta de la eficacia de la aplicación, del dinero invertido y de los eventuales perjuicios al medio ambiente cuando los excesos de nitrógeno son arrastrados a la freática.

La dosificación en grandes extensiones, es mucho más sencilla que en pequeñas superficies de jardín.

Un césped de color verde-amarillento, se puede mejorar con la aplicación de nitrógeno.

Los ríos reciben las aguas freáticas de los valles irrigados y llevan la contaminación al mar.