Tiempo de cosecha en el campo de lavanda de Villa Llanquín: aromas, color y sonidos
Febrero es tiempo de cosecha en el campo de Villa Llanquín. Un festival celebra el trabajo y convoca a una experiencia única.
Si los sentidos tienen memoria, visitar el campo de lavandas es una experiencia tan totalizadora que se queda grabada en tu cuerpo, no solo en tu mente. Salimos en auto desde Bariloche por la Ruta 237 hasta Villa Llanquín, un paraje a orillas del río Limay, en la estepa rionegrina, al que para llegar tuvimos que cruzar en balsa. En ese instante empezó la maravilla. Mediante un sistema que utiliza como empuje la corriente del río (maroma) llegamos a la otra orilla.
Seguimos unos metros más y llegamos a Lavandas del Limay un parque agroecológico único en el país que, desde hace 11 años, produce estas y otras plantas para su comercialización y utilización en diferentes productos. Allí nos recibieron Cristian Signorelli y Maximiliano Agüero Pellegrini los dueños de la finca. Un aroma suave se nos instaló en la nariz, como pidiendo permiso.
De la mano de ellos recorrimos el campo con más de 4000 ejemplares, reconocimos las distintas variedades, nos sentamos en una glorieta rodeados de flores de colores azulinos y violáceos y visitamos el vivero donde hacen los plantines con mucho cuidado y amor. Después fuimos a la Casita de Té; allí comimos muchas cosas ricas de pastelería artesanal, elaboradas a base de lavandas y decoradas como pequeñas obras de arte.

“El Parque Agroecológico Lavandas del Limay nació con un sueño”, contó Cristian, “queríamos un cambio de vida, más en contacto con la naturaleza. Somos amantes de las plantas y los aceites esenciales; y el de lavandas es el más usado y vendido alrededor del mundo por su versatilidad y usos en salud, higiene, belleza y cocina. El equipo de trabajo está integrado por cinco personas y en alta temporada somos 15”.
Este no solo es un proyecto productivo, es una fuerte apuesta al turismo en la que se ofrece una experiencia sensorial e inmersiva para los visitantes. “Les hacemos conocer las variedades y también el aroma de cada una de ellas. Es una vivencia donde la gente viene, visita, conoce, aprende y se sorprende”, aseguró.

Desde hace muchos años trabajan en forma conjunta con el INTA Bariloche para profundizar en los cuidados y necesidades de las plantas así como en el desarrollo productivo de la plantación. El año pasado recibieron una distinción por el impacto y los alcances del proyecto en la región.
“Estamos en crecimiento continuo”, señaló Cristian, “dando asesoramiento personalizado para nuevas producciones, variedades y trazabilidad de los productos. Próximamente vamos a ofrecer alojamiento para que los turistas puedan descansar acá y seguimos también apostando al desarrollo culinario”.
Festival de la cosecha de lavanda
En febrero el campo se ve hermoso, la planta está en todo su esplendor y es cuando se recogen las flores. “Para nosotros es súper especial”, calificó Cristian, “nos preparamos todo el año, vienen más visitantes y extraemos el aceite esencial. Es nuestro momento más intenso y alegre, con más trabajo, donde podemos disfrutar de la compañía y de las preguntas de la gente”.
La cosecha de lavanda se celebra con un festival de tres días 21, 22 y 23 de febrero. “Estamos muy contentos, tenemos grandes expectativas porque el año pasado la repercusión fue increíble. Vinieron más de 1000 personas y este año esperamos 2000. A menos de un mes nos preparamos con todo para que la gente la pase estupendo y tenga un momento espectacular”, anticipó.

Habrá destilación en vivo, cada uno cosechará su ramo y lo pondrá en el destilador. También se realizarán desfiles de modas, charlas y talleres con especialistas. Este año, la novedad es la música de las plantas, una experiencia inmersiva de la mano de un DJ y artista sensorial que, mediante sensores, obtiene los sonidos de las plantas y los transforma en música. Para no pérdérselo.
Las entradas ya están a la venta. Algunas actividades están incluidas con el ingreso general, mientras que los talleres y charlas requieren una reserva previa, la cual se puede realizar a través de la página oficial del festival.
Villa Llanquín, un refugio escondido
Este paraje de Río Negro es el lugar perfecto para desconectar de la rutina y sumergirse en la naturaleza. Se puede acceder de dos maneras: una es cruzando el puente colgante peatonal, y la otra es cruzando el río y haciendo un corto trayecto en balsa. La balsa está disponible todos los días, de 8 a 20 horas. El servicio es gratuito tanto para los residentes como para los turistas.
Con una atmósfera tranquila y acogedora, hay diversas opciones de alojamiento, como cabañas, campings y hoteles. El lugar es muy popular entre quienes disfrutan del trekking, el canotaje y la pesca.

Explorar este paraíso es un plan inmejorable: paseos a caballo por el campo, senderos ideales para caminatas o ciclismo, zonas del Limay perfectas para la pesca de truchas, o para disfrutar de un chapuzón refrescante. De noche, la falta de contaminación lumínica permite admirar el brillo de las estrellas en todo su esplendor.
Además del campo de lavandas, tiene atractivos como las Piedras Coloradas, para los amantes de la escalada, circuitos de mountain bike, una feria local con productos caseros y artesanías, campings, cabañas, y una hostería con restaurante.
Festival de la cosecha de lavanda: el cronograma de actividades
Viernes 21 de Febrero
- 9:00 a 10:00: Visita Guiada: El maravilloso mundo de las Lavandas
- 10:00: Apertura e ingreso general del Festival
- 10:00 a 12:00: Taller «Preparados Herbarios con Lavanda»
- 12:00: Cosecha y Destilación en Vivo – Sorteos
- 12:30 a 14:00: Aromáticas y Lavandas: aromas, sabores y colores
- 15:00: Taller: Manos que tejen aromas. Unete a una experiencia creativa y aromática.
- 17:00: Cosecha y Destilación en Vivo – Sorteos
- 18:00: Sunset Session – Música de las Plantas – Carrito de Gin de Lavanda (ATHOS GIN)- Intervencion de Moda (ILEANA LLANCA)
Sábado 22: el cronograma del sábado es idéntico al del viernes, permitiendo a los visitantes disfrutar de las mismas actividades y talleres.
Domingo 23: el domingo también replicará el cronograma de las jornadas anteriores, ofreciendo una última oportunidad para participar en todas las actividades programadas.
Actividades Destacadas
- Visita Guiada: Aprender sobre el cultivo y la historia de la lavanda. Embárcate en una experiencia única con nuestra Visita Guiada al Mundo de la Lavanda. A partir de las 9 am, tendrás la oportunidad de explorar todo lo que necesitas saber sobre esta maravillosa planta.
- Talleres:
- Preparados Herbarios: Conocer diferentes formas de utilizar la lavanda en la medicina alternativa. Todo lo que elaboraremos será ideal para crear tu propio botiquín naturalista. Facilita: Dra. Natalia Kerz, médica generalista con orientación antroposófica.
- Manos que tejen aromas: Un taller creativo para explorar la combinación de aromas. En este taller aprenderemos a crear delicados bastones de lavanda tejidos con cintas, mientras ponemos en práctica la motricidad de nuestras manos. De la mano de Mónica Elsa Lefiñanco RESERVA AQUI
- Charla de Aromáticas y Lavandas: Aromáticas y Lavandas: aromas, sabores y colores. Charla con la Ing. Maria Laura Berzins de la cooperativa Aromaticas del Alto Valle, donde exploraremos el fascinante mundo de las plantas aromáticas y sus infinitas posibilidades.
Actividades incluidas
- Ingreso al Parque de Lavanda: donde podras ver el parque florecido, apreciar las diferentes variedades y disfrutar de momentos unicos en un ambiente inigualable.
- Cosecha y Destilación: Participar en el proceso de recolección y destilación de la lavanda en tiempo real. Te vamos a enseñar como cosechar para que juntos llenemos el destilador y entiendas como es el proceso de destilacion.
- Degustaciones: Disfrutar de productos locales, como el gin de lavanda (ATHOS GIN) disponible en sunset session, que destaca por su sabor único.
- Musica de las Plantas: Alguna vez escuchaste las lavandas? Mediante sensores crearemos la musica de las lavandas. Experiencia inmersiva en contacto con la naturaleza musical de nuestras plantas de la mano de Hilario Gramaglia.
Importante: no se permite el ingreso con mascotas, está prohibido arrancar flores ni hojas y no se permite fumar en el Parque.
Si los sentidos tienen memoria, visitar el campo de lavandas es una experiencia tan totalizadora que se queda grabada en tu cuerpo, no solo en tu mente. Salimos en auto desde Bariloche por la Ruta 237 hasta Villa Llanquín, un paraje a orillas del río Limay, en la estepa rionegrina, al que para llegar tuvimos que cruzar en balsa. En ese instante empezó la maravilla. Mediante un sistema que utiliza como empuje la corriente del río (maroma) llegamos a la otra orilla.
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