Banta, La estudiante que llegó de Mali

Los nuevos migrantes que recibe nuestra ciudad provienen en su mayoría de países de África y Asia. Algunos vienen escapando de la pobreza, como mencionaba Muñoz. En su caso, Banta, una joven de Mali, se encuentra en la región realizando estudios universitarios. Llegó con dieciocho años desde la ciudad de Mamaco. Su hablar es suave y de un español fluido. Hace tres años arribó para estudiar Medicina en la Facultad de Medicina de la UNC con sede en Cipolletti. Ahora bien, ¿por qué venir por decisión propia a Neuquén?: “El perfil de la carrera me interesó mucho por el sentido humano que se le da al médico, me gustó el perfil de nuestra universidad”. Banta es una de las tantos migrantes que integran la Pastoral y que también generan actividades de integración para con la comunidad que los contiene. “La idea surgió entre todos, porque los compañeros de Senegal tienen dificultades por el idioma, hacer una clase para ayudarles más, después vino la idea de dar clases de árabe”, comenta Banta en referencia a la escuela intercultural que están planeando. “Acá me siento bien, me tratan bien en la universidad mis compañeros, es muy lindo, es una experiencia que nos hace crecer”. Sin embargo Banta explica que “por ahora el proyecto es volver (a Mali) y poder ayudar allá porque la realidad es muy difícil en la prevención de salud y la promoción”. “Yo noté que en la prevención de la salud falta mucho para hacer, sobre todo las políticas públicas”. La joven cuenta que en Mali “hace dos años había un conflicto político, un intento de golpe de Estado y son situaciones que pasan que por ahí bloquean el desarrollo sustentable. Pero hay organizaciones que trabajan mucho para que el país se pueda restablecer y avanzar, y en eso quisiera avanzar”. Para Banta sería un sueño que algunos de sus compañeros de la facultad viajaran a al África para conocer y ayudar. Mali “es un país donde la gente es amable y abierta, espero que mis compañeros de Medicina se animen para ir, es mi gran esperanza”.