Patricia Bullrich propuso «filmar las reservas del Banco Central»: pero, ¿qué hay en el interior?

La precandidata de Juntos por el Cambio aseguró que de alcanzar la presidencia entraría con cámaras de TV a la bóveda del Banco Central. La expresión generó fuertes repercusiones por el desconocimiento de la realidad. Qué hay efectivamente allí.

El país atraviesa el último tramo de la campaña electoral de cara a las PASO del próximo 13 de agosto y los candidatos están tirando «toda la carne al asador» en materia comunicacional, con buenos y malos resultados. Una de las que salió a dar polémicas definiciones fue la precandidata a presidenta de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich.

La referente del PRO expresó este lunes que si fuera elegida en el cargo ingresaría con una cámara de televisión a mostrar las reservas del Banco Central, al buen estilo de las películas. Sus dichos causaron importantes repercusiones y mucha preocupación por parte de especialistas económicos, ya que denota desconocimiento de la realidad.

“Nuestro equipo económico va a presentar un modelo después de que veamos cómo está el acuerdo con el Fondo, qué nos deja Massa. Lo primero que vamos a hacer es entrar con una cámara de televisión al Banco Central, para mostrarle a la gente qué Banco Central nos dejan, para que vean que no están las reservas, que hay reservas negativas”, soltó Bullrich en una reciente entrevista a LN+.

En ese tramo de la nota, la precandidata se encontraba hablando acerca de su propuesta de quitar el cepo al dólar porque “se come todas las reservas”. En medio de la charla, uno de los periodistas le explicó que no hay reservas físicas guardadas allí, pero Bullrich redobló la apuesta para reforzar su teoría: «No hay más reservas, hay reservas negativas. Es importante que el pueblo argentino lo sepa», dijo.

La expresión de la exministra de Seguridad no pasó desapercibida e incluso generó críticas y burlas con referencia a la serie española La Casa de Papel.

El más preocupado por su teoría fue su principal asesor económico, Luciano Laspina, y el ascendente armador, Damián Arabia. Unas horas después, ambos salieron a aclarar la intención de los dichos en un comunicado.

Arabia habló del uso de una metáfora, mientras que Laspina usó su cuenta de Twitter para ir en esa misma línea: «Es curiosa la literalidad con que se toman las palabras en esta campaña. Si me escuchan decir ‘vamos a derrotar la inflación’, no deberían interpretar que sugiero bajar los precios con tanques y balas. O ‘el dólar hoy se fue a las nubes’, que el viento se llevó un billete verde», expresó.


Qué guarda el interior del Banco Central


La realidad es que la mayor parte de las tenencias del Banco Central son asientos contables o existencias digitales. Según algunos exfuncionarios, hay algo más de un centenar de lingotes de oro, algunos pocos dólares destinados a abastecer a las necesidades de efectivo de los bancos del país y pesos.

Las únicas reservas materiales que tienen los bancos centrales son de oro, que no necesariamente se encuentran radicadas en el país. En cuanto a las divisas (dólares y yuanes) se encuentran en distintas instituciones que pueden variar desde la Reserva Federal de Estados Unidos, el Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés) u otras instituciones que se encargan de resguardar ese tipo de recursos.

El último informe de reservas internacionales que elabora el Banco Central para el Fondo Monetario Internacional (FMI) detalla parcialmente esas tenencias, actualizadas al 30 de junio.

En ese momento, las reservas brutas alcanzaban los USD 27.925 millones (desde entonces cayeron, el dato del 1° de agosto las ubica en USD 24.037 millones debido al golpe que supuso el pago de un vencimiento de USD 1.700 millones y las ventas que hace a diario la entidad para abastecer importaciones).

De esas tenencias actualizadas al cierre de junio, algo más de USD 23.000 millones eran “reservas en moneda extranjera”.


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