Plan Castello: quedan unos 3.000 millones y faltan ocho obras por finalizar

Siguen en ejecuciones tres plantas cloacales -Viedma se inauguraría en agosto- y, entre otras, construcciones eléctricas y el edificio del Ipross. Lo disponible se concentra en depósitos en pesos y títulos provinciales, con un pequeño remanente en dólares.

La disponibilidad de fondos del Plan Castello ronda los 3.000 millones de pesos, entre depósitos y títulos provinciales. Ese saldo incluye un remanente de 131 mil dólares.

El total está destinado a la finalización de ocho ejecuciones aunque en el gobierno provincial nadie asegura que ese monto sea suficiente.

En el primer semestre, la Provincia utilizó unos 3.270 millones para las constructoras y, además, cancelaciones de intereses de los bonos rionegrinos, que se negociaron a fines del 2017 por 300 millones de dólares y dieron origen a este Fondo Fiduciario de Infraestructura.

En principio, el listado incluyó a 24 obras, quedando por concluir ocho de ellas, hoy con distintos niveles de ejecución. Dos construcciones eléctricas -estaciones y líneas de El Solito y Conesa- están programadas como cuatro proyectos.

En el informe del segundo trimestre del año, se consigna la existencia de 131.805 dólares, contabilizados además por algo más de 16,5 millones, a partir de una cotización de 125 pesos por moneda estadounidense.#En el cierre de marzo, ese saldo era superior a los 8 millones de dólares pero, después, gran parte fue destinado a cancelar la primera cuota semestral de intereses por los bonos.

Además, la cuenta corrientes en pesos registra un poco más de 190,3 millones. El total disponible llega a los 206,8 millones, con los 16,5 millones de pesos estimados por los dólares depositados.

La inversión existente del Fiduciario corresponden a Letras de Río Negro, con un valor técnico en junio de unos 2.544 millones y, actualmente, significarían unos 2.800 millones.

En concreto, entre los saldos en las cuentas y esos títulos, la disponibilidad se aproximaría a los 3.008 millones de pesos.

En comparación a lo utilizado en el primer semestre, ese monto alcanzaría -ajustadamente- para concluir el año. Se saben que no todas las construcciones podrán concluirse en el 2022.

El “flujo neto de efectivo” usado en el período enero-marzo fue de 1.256 millones y en el posterior llegó a 2.011 millones, arrojando 3.267 millones.

Frente al agotamiento del Fiduciario, “los fondos para las finalizaciones de las obras saldrán de Rentas Generales”, repiten siempre los funcionarios.

Entre las finalizadas, el Gasoducto de la Línea Sur -restando tareas complementarias- tuvo el mayor costo, con 2.100 millones. La nómina comprende los planes cloacales de Las Grutas, Playas Doradas, Mainque y Luis Beltrán; la estación transformadora de Cipolletti; la repavimentación de la ruta 2; los caminos productivos en Chichinales, Colonia Juliá Echarren y Paso Piedra; la ruta 86 en El Bolsón; el Parque Tecnológico de Bariloche; Nodo de Transporte en Los Menucos; ampliación de pluvioaluvionales en Cipolletti; mejoramiento de captación del brazo sur de Beltrán; y obras de agua para la zona oeste de Roca y JJ.Gómez.


Disminuye su participación y se aproxima la presión del pago


En septiembre, Río Negro deberá abonar la segunda cuota semestral por intereses de los bonos, que es cercana a los 8 millones de dólares.

El 2023 será un poco mayor y la real presión se advertirá en el 2024 cuando se incorporen las obligaciones por capital y sumarán unos 91 millones de dólares. Significaría hoy unos 13.000 millones de pesos.

A mayo, la deuda por los bonos del Castello sumaba unos 38.430 millones de un pasivo total provincial de 62.425 millones de pesos.

Se acerca la fuerte exigencia y, en contrapartida, decae la participación de esos recursos extraordinarios en las construcciones estatales.

El Plan Castello llegó a representar casi la mitad de las obras concretadas por Río Negro. En el 2020, fue del 47% y del 42% en el 2019.

Cayó el año pasado al 18% y se preveía en el 14% en el 2022.

Igualmente, el primer semestre del año marcó una fuerte reducción en relación al 2021. Puntualmente, en relación a las certificaciones abonadas a las empresas, en el último trimestre del ejercicio anterior, el Fiduciario transfirió unos 3.300 millones.

Durante este año, esos pagos fueron de 450 millones y 1.200 millones en el primero y en el segundo trimestre, respectivamente.

Tres planes de líquidos cloacales quedan por finalizar. En realidad, el de Viedma, está casi listo, restando la conexión eléctrica, previéndose su habilitación para agosto. Falta más en las plantas de Regina y Cinco Saltos.

Resta poco, pero queda por concluir las estaciones Transformadoras de El Solito y Conesa, con sus líneas de conexiones. Muy avanzadas están las redes cloacales y del gas del Parque Tecnológico de Bariloche.

Las más relegadas son el edificio central del Ipross en Viedma y el sistema de riego en Campo Grande.


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