Santa Apolonia, patrona de los dientes: Cómo pedirle en momentos difíciles
Tras ser perseguida por su fe en Dios, Apolonia fue golpeada y le removieron sus dientes. La Iglesia Católica celebra hoy su vida y su devoción.
Santa Apolonia es considerada la patrona de los dientes y ayuda con los problemas bucales.-
La Iglesia Católica celebra cada 9 de febrero a Santa Apolonia, quien nació en Alejandría (Egipto) en el Siglo III, y es considerada la patrona de los dentistas y cirujanos dentales. Se recurre a ella para pedir su intercesión por problemas bucales, además de en momentos difíciles.
Sus padres deseaban fervientemente tener hijos, pero no podían. Como eran paganos, invocaron a numerosos dioses y no lograron ganar ese favor. Sin embargo, la madre de Apolonia recibió el mensaje de la Virgen María, quien la ayudó a concebir. Por esa razón, la santa fue criada en los conocimientos de la fe católica.
En tiempos del emperador romano Felipe el Árabe, máxima autoridad imperial en Alejandría, comenzó una feroz persecución contra los cristianos, a quienes se les acusaba de atraer el mal augurio, desastres y tragedias. En ese contexto, Apolonia terminó prisionera y sus captores le rompieron todos los dientes a golpes.
Apolonia murió aferrada a Dios, a pesar de la persecución cruel del imperio romano, cuando decidió lanzarse a la hoguera que sus verdugos habían preparado por si ella no cambiaba de opinión respecto de su fe.
La oración para Santa Apolonia en momentos difíciles
Santísima virgen y fervorosa mártir,
abogada mía, Santa Apolonia,
llena de amor a Dios,
que con la constancia
de muchos años de virtud
te hiciste respetable y venerable
a toda Alejandría.
Ayúdame bendita santa,
escucha mi súplica,
dame tu favor y ayuda
en estos momentos de angustia,
dolor y desolación de mi alma.
Emplea tu intercesión con Dios,
y tu patrocinio conmigo
en hacerme digno devoto tuyo
por la imitación de tus virtudes,
y constancia en los buenos propósitos:
Alcánzame asimismo
el favor que te pido en esta ocasión,
interponiendo con tus méritos
los de mí Señor Jesucristo.
Amén.
(Se hace la petición y se reza tres veces
el Padre nuestro, el Ave María, con Gloria).
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