Regina: rechazan traslado de servicio de neonatología para instalar camas de UTI
En el hospital de Regina prevén trasladar el servicio de neonatología a otro sector del edificio para instalar tres respiradores para la UTI. El movimiento del servicio generó rechazo de los trabajadores de la salud por los riesgos que implicará el movimiento por pasillos con recién nacidos.
Trabajadores del servicio de neonatología no quieren el trasladado a otro sector dentro del hospital de Regina.
El desmantelamiento y traslado del servicio de neonatología dentro del hospital de Regina para la instalación en ese lugar de las anunciadas tres nuevas camas de terapia intensiva, generó el rechazo de trabajadores de la salud, por los riesgos que implicará el movimiento de pequeños recién nacidos con problemas de salud por escaleras para su atención médica.
La gobernadora Arabela Carreras visitó la semana pasada el hospital de Regina para la entrega de respiradores para la puesta en funcionamiento de tres nuevas camas de UTI, pero en las últimas horas las enfermeras del servicio de neonatología fueron informadas que su servicio -ubicado en el tercer piso próximo al área de maternidad y de quirófanos-, será trasladado al segundo piso dentro del área de pediatría.
El movimiento es para aprovechar los paneles de oxígeno con los que cuenta neonatología para la instalación de los respiradores y las camas de terapia intensiva para la atención de pacientes covid con problemas respiratorios.
Sin embargo, este traslado generará que se dificulte la atención de los bebés que son atendidos en neonatología, dado para atención en quirófanos y en la maternidad, tendrán que trasladarlos por los pasillos, escaleras o el ascensor del hospital.
El reclamo de los trabajadores, no solo se motivó en los riesgos que este movimiento implicará, sino en que en gran medida fueron los mismos trabajadores los que lograron equipar con los elementos necesarios el servicio de neonatología.
El malestar lo hicieron público en una nota que las enfermeras del sector elevaron al director del hospital reginense, Osvaldo Ruíz Díaz, donde expresaron el desacuerdo total a la decisión “de ceder el espacio físico del servicio de neonatología”, al tiempo se deslindaron “de las consecuencias que puedan sufrir los recién nacidos por las decisiones tomadas”.
Agregaron que la ocupación del área de neonatología “no es la única opción para dar respuesta a esta pandemia, luego de siete meses de que sea declarada la misma”.
“Los cambios ofrecidos no son seguros para resguardar la atención de los recién nacidos, debido a que estaremos en un piso diferente al servicio de maternidad y quirófanos, donde se encuentra la recepción de nacimientos, usando escaleras y ascensores públicos los cuales no creemos epidemiológicamente aptos para circular con pacientes neonatos”, enfatizaron las trabajadoras del sector.
Por otra parte insistieron que con el esquema de división y traslado del servicio “se pretende que los recién nacidos sanos queden en maternidad y los patológicos en pediatría en una habitación improvisada, precarizando nuestra atención al paciente”.
Insistieron que antes de la entrega la semana anterior de los nuevos respiradores, se había propuesto su instalación del cuarto piso del hospital, dentro del área de internación, pero que esa propuesta se modificó para avanzar en la instalación dentro de neonatología.
Marcela Gauna, enfermera del servicio, en representación del resto de las trabajadoras del área, señaló que “estamos totalmente en desacuerdo con la decisión que se tomó de bajar neonatología un piso. La ubicación que tiene actualmente es estratégica, porque ante cualquier urgencia nosotros tenemos para la atención el sector de recepción dentro del quirófano”.
Comentó que el trasladado propuesto a dos habitaciones en el segundo piso en el servicio de pediatría “nos queda muy incómodo, en el sentido de que los bebés pueden tener alguna urgencia y estamos en pisos diferentes de los sectores en los que se puede hacer una adecuada atención, en donde vamos a tener que correr con bebés por las escaleras o en los ascensores con un gran riesgo y con consecuencias graves”.
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