Sudestada y frío en el inicio de semana en Viedma

Después de un amanecer agradable, frío y viento dominaron el resto de la jornada del lunes.

El tiempo

La primavera se hace esperar en el este rionegrino. Ayer, el amanecer anunciaba una jornada diáfana y cálida y muchos creyeron que continuaría el buen tiempo tras un fin de semana agradable con apenas algunas lluvias intermitentes y unas pocas nubes nocturnas que sólo sirvieron para ocultar el esperado eclipse de la “luna roja”.

Sin embargo, el sol que comenzó a brilla apenas antes de las 7, con cerca de 12 grados de temperatura, se ocultó a la hora siguiente tras densos nubarrones que, acompañados por un viento intenso, conformaron una fuerte tormenta que de repente se desató sobre la zona y provocó un rápido descenso de la sensación térmica.

El clima invernal se extendió durante toda la jornada. Las ráfagas del sur y la marea generaron una crecida inusual del río Negro en Viedma y Patagones y del mar en El Cóndor que por suerte no ocasionó mayores complicaciones.

“Fue tremendo el viento y la lluvia desde las 10 a las 12 del mediodía, pero afortunadamente la precipitación fue persistente, llovió parejito, pero no muy intensamente, lo que hizo que el agua drenara sin inconvenientes”, dijo José Luis García Pinasco de la Junta Vecinal del balneario.

La luz se cortó un buen rato y el mar se mostró picado y bravío, aunque no hubo desmoronamientos importantes en la zona de acantilados ni ingresó el agua al sector de juegos en la playa central.

Por su parte, el integrante del staff de la delegación municipal, Juan Baffoni, dijo que hubo “un poco más de lluvia que en Viedma, con un intenso viento sur” y adelantó que era necesario aguardar la marea de la noche para ver, si continuaba el viento del mismo sector, si ocasionaba algún problema.

“Las bocas de tormenta funcionaron bien y sólo hubo un corte de luz al mediodía”, afirmó Baffoni.

En tanto, en Patagones el subsecretario de Servicios Urbanos, Héctor Muhall, informó que debido a las inclemencias climáticas, personal del área se abocó en horas de la tarde al relevamiento de distintos sectores que pudieran haber sido afectados por los fuertes vientos de las últimas horas.

Explicó que “nos encontramos recorriendo diversos sectores de la ciudad para relevar los distintos inconvenientes que se pudieron suscitar con las condiciones del clima. Por el momento, se registra la caída de algunos árboles, pero no hemos observado mayores inconvenientes”.

Al mediodía, el río creció llamativamente hasta cubrir el muelle de los Guardavidas en la capital rionegrina y llegó casi hasta el terraplén de contención, pero no sobrepasó los límites previstos.

La lluvia continuaría hoy durante buena parte de la jornada, las temperaturas seguirían bajas a excepción del miércoles cuando podría llegar a los 23 grados aunque con mucha nubosidad. El sábado también se anuncia una máxima que ronde los 20 grados, pero el resto de los días hasta el domingo no serán más elevadas de entre 12 y 14 grados y el viento y las nubes seguirán presentes, mientras el invierno no termina de despedirse.

DeViedma


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