Violencia de género: dictan prisión preventiva para integrante del clan Montecino

La semana pasada el imputado le cruzó el auto en la vía pública a la víctima e intentó agredirla con un bate de béisbol.

Pablo Montecino, integrante del clan de Cipolletti, permanecerá 90 días en prisión preventiva por hostigar y golpear a una mujer. La fiscalía le formuló cargos esta tarde por amenazar, ahorcar y atacar con una bate a una jovencita en la calle La Esmeralda.

En la audiencia, el Ministerio Publico Fiscal le imputó cuatro hechos que ocurrieron a lo largo de octubre. Primero amenazas en el celular de la joven, luego le cruzó el auto, la golpeó afuera de un comercio y finalmente la ahorcó en la puerta de un edificio de la calle La Esmeralda.

La víctima hizo el público el caso con la viralización de un video en las redes sociales en el cual muestra cómo el imputado le cruza el auto en la vía pública y la agrede. El hecho tuvo trascendencia nacional.

En uno de esos episodios quiso atacarla con un bate de béisbol pero la mujer se encerró en su camioneta, en plena vía pública, y él  golpeó  al parabrisas.

La jueza de garantías Rita Lucia le dio por formulados los cargos y dictó 90 días de preventiva. Montecino estuvo asistido por el abogado Juan Luis Vincenty y por la fiscalía intervinieron Santiago Márquez Gauna y Martín Pezzetta.

Montecino, junto con sus hermanos, ha estado en la mira del fiscal Guillermo Merlo que los acusó de comandar una asociación ilícita dedicada a comprar y vender autos con problemas mecánicos y de papeles. Sin embargo la causa tuvo varios traspiés y terminó con una condena menor.

Algunos integrantes de la familia Montecino fueron condenados por causas de narcotráfico e incluso el actual senador Alberto Weretilneck, cuando era intendente de la ciudad, emprendió una campaña para desterrar al clan por todos los hechos delictivos que se le atribuían.

Su madre, Ruth Montecino  transita una condena de 15 años por narcotráfico. En abril pasado, la justicia Federal de Neuquén le otorgó el beneficio de la prisión domiciliaria por un problema de hipertensión. Esa enfermedad la ubica en población de riesgo en el escenario de pandemia por el coronavirus y fue el argumento que esgrimió el  juez Alejandro Cabral para el beneficio.


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