Gripe aviar: Río Negro es la provincia con más muertes de lobos marinos
Se reportaron 935 fallecimientos. Cuáles son las hipótesis según experto del Conicet
El Senasa recomienda no manipular animales muertos o con sintomatología sospechosa
En el mundo se está desarrollando una “panzoonosis”, que es una epidemia global de gripe aviar por la diversidad de especies de animales que afectó. Desde 2021 no ha parado de crecer a “tasas alarmantes” y tiene alta mortalidad, según advirtió la Organización Panamericana de la Salud. Afectó a millones de aves y también a mamíferos.
Gripe aviar: cómo afectó a Neuquén y Río Negro
En la Argentina, la panzoonosis también llegó a dañar la salud de las aves primero en febrero pasado, y desde agosto se detectó que produjo la muerte de más de mil lobos marinos que estaban a lo largo de la costa atlántica, desde la provincia de Buenos Aires hasta Tierra del Fuego.
En la provincia de Río, se registró el mayor número de lobos marinos fallecidos por la gripe aviar en la Argentina. Ya murieron 935 animales, según informó la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático. Dentro de ese total, 696 estaban en el área natural protegida Punta Bermeja, a 45 kilómetros de la ciudad de Viedma.
El veterinario y doctor en biología Pablo Plaza, del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA) -que depende del Conicet y la Universidad Nacional del Comahue- comentó que existen varias hipótesis para explicar la situación. “Una de las hipótesis es que el contagio haya sido a través de aves silvestres infectadas que cohabitaban con los lobos marinos. También puede haber ocurrido en Perú. Sin embargo, existe la posibilidad de que el virus de la gripe aviar se haya adaptado y se está transmitiendo entre lobos marinos. Esta posibilidad ha sido sugerida en otros mamíferos, como los visones en España”, afirmó el científico.
“Aún no se sabe por qué la gripe aviar afecta más a lobos marinos. Pasó también en Perú y en Chile. Con los que murieron en la Argentina, ya suman más de 20.000 animales fallecidos”, agregó. “Las condiciones de salinidad y temperatura también pueden favorecer que el virus quede más tiempo y favorezca su transmisión”, señaló.
El experto comentó que “existe la posibilidad de que haya más casos de animales fallecidos en otras jurisdicciones, con grandes extensiones, y que no haya sido detectados aún”. En el caso de Río Negro, hay colonias con muchos ejemplares y personas que trabajan en esas zonas. Podría haber ocurrido que esa situación haya facilitado la vigilancia y por eso podría haber más muertes notificadas, sugirió el doctor Plaza.
Dina Migani, Secretaria de Ambiente y Cambio Climático de la provincia de Río Negro, dijo que se iba a capacitar a agentes del área para la toma de muestras y seguimiento de casos: “Queremos verificar si existe alguna mutación del virus, con una potencial probabilidad de infección, porque no se sabe cómo se infectaron los lobos. Se estima que la enfermedad se trasladó de aves a lobos, pero puede existir una mutación, con posibilidad de contagio a los seres humanos”.
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