¿Qué no te puede faltar en esta cuarentena? Responde Sabrina Carreño

Como una adaptación del clásico “¿qué te llevarías a una isla desierta?”, en esta oportunidad le preguntamos a Sabrina Carreño, primera bailarina del Ballet Río Negro de Fundación Cultural Patagonia (FCP).

“¿Qué objetos te llevarías a una isla desierta?” era un juego de la imaginación en épocas previas a la pandemia y al encierro.

En este contexto, decidimos adaptar la consigna y les preguntamos a nuestros invitados qué imprescindibles tienen durante el aislamiento.


En esta oportunidad, nuestra invitada a la sección es Sabrina Carreño, primera bailarina del Ballet Río Negro de Fundación Cultural Patagonia (FCP).

Entre sus distintas selecciones, una de las que más destaca es justamente una actividad: el yoga. Según explica Sabrina, “la práctica de yoga es fundamental en mi vida. Sumado a las clases de danza que brindo en el IUPA (Instituto Universitario Patagónico de las Artes) en diferentes días y horarios; tres veces a la semana: lunes, miércoles y viernes practico yoga en clases en línea. Es una gran forma de crecimiento para el cuerpo y el alma”.


Con la misma dedicación que pone a diario para su labor de docente, y con el entusiasmo que la acompaña en cada subida al escenario, Sabrina nos cuenta un poco sobre sus imprescindibles en cuarentena.

Los repasamos a continuación:


Familia



“Compartimos muchos momentos los cuatro, con mis dos hijos y marido. Por la mañana, vemos qué tareas tienen los chicos. Cocinamos más cosas de lo normal… ¡Aprendí a hacer masa de tarta casera, y salió riquísima! La familia es el pilar de mi vida”.


Contacto virtual



“Además de clases por zoom, que implicaron un desafío y me permiten estar cerca de los alumnos; es importante sentirnos menos distanciados. Compartir un café, una charla, una salida, es algo que vamos a valorar más desde ahora, y que dejaremos de postergar”.


Mi casa y mi patio



“Irremplazable. Compartir con la familia y disfrutar de la naturaleza es maravilloso, me permite un equilibrio entre la obligación y el placer. En el principio de la cuarentena, hubo menos viento, pero siempre se disfruta”.


El sillón



“El compañero de la familia. Para leer, mirar series, charlar. Un espacio de la casa en el que relajarse, disfrutar y descansar es muy importante. Establecer una rutina para diferenciar los días hábiles del fin de semana es necesario”.


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