Una rayuela larga, larga, para jugar en todo Neuquén
La hacen chicos y grandes, y salta de 9 en 9 y de ciudad en ciudad. El 1 está en San Martín de los Andes y el 299 en Chos Malal. El proyecto suma 60 localidades de todo el país, pero la mayor parte ocurre en Neuquén, donde hay 47 lugares.
El momento en que Villa Pehuenia dejó inaugurada su rayuela y su parte en este largo juego.
Una rayuela que una a todo el país. Que sea la más larga del mundo y que sirva de inspiración para que el juego y el arte se conviertan en un espacio de expresión para los más chicos.
Ese fue el sueño y el disparador de este proyecto que ya suma a 47 localidades de todo Neuquén ya otras 13 del resto del país (que incluyen Santa Fe, Córdoba, Río Negro, Salta, Misiones y Buenos Aires). Todo comenzó a partir del proyecto del pedagogo italiano Francesco Tonucci, que participó de la primera asamblea de la Red Nacionales de ciudades de niñas y niños. ¿Qué busca? Recuperar el espacio público para el juego.
Los primeros trazos de la primera rayuela se hicieron en San Martín de los Andes, que tiene el honor de tirar la primera piedra para saltar del 1 al 9 en sus calles. Pero, a instancias de la subsecretaría de Niñez y Adolescencia del Ministerio de Niñez, Adolescencia y Juventud de Neuquén, el juego ya se extendió por 47 localidades.
Carolina Guajardo, directora provincial de Niñez de Neuquén, explicó a RÍO NEGRO que el objetivo “es instalar el juego en espacios públicos que promueven la alegría, la convivencia, los buenos tratos, la convivencia. El arte y el juego son expresiones concretas en la construcción de mundos y territorios posibles”.
Además, el proyecto implica la reunión de chicos y grandes también en las calles. Son ellos, junto a artistas de la región, los que le dan forma a esa secuencia de números.
“Cada proceso fue distinto. Algunas rayuelas fueron diseñadas por artistas plásticos de la zona (como la de Plaza Huincul); en otras el diseño fue propuesto por las niñeces, y en otras, la propuesta del diseño fue de las personas adultas pero pintado de forma participativa por la comunidad”, explica Guajardo.
“También esto estuvo muy atravesado por la situación epidemiológica, en algunos lugares las niñeces no pudieron participar por los protocolos de covid y en otras participaron activamente”, agrega.
Lejos, pero cerca
La rayuela, en su versión clásica, incluye la tierra, en su inicio, y el cielo, al final. En este caso, en el lugar de la “tierra” se inscribe el nombre de la localidad de la que viene el juego correlativamente, y en donde figuraría el “cielo”, se anota la localidad que continuará esa rayuela. De ese modo, el juego puede empezar, por ejemplo, en Mercedes, seguir en Piedra del Águila y después extenderse por Roca en Río Negro.
San Martín de los Andes fue el punto de partida porque cada noviembre, desde 2016, se celebra allí el Mundial de Rayuela. El resto de las localidades neuquinas que participan son Piedra del Águila, Villa El Chocón, Zapala, Buta Ranquil, Tricao Malal, Taquimilán, Andacollo, Rincón de los Sauces, Aluminé, Las Coloradas, Mariano Moreno, Picún Leufú, Neuquén, El Cholar, Villa La Angostura, Bajada del Agrio, Villa Pehuenia, Caviahue, Plaza Huincul, Chos Malal y Aguada San Roque.
Cada localidad integrante que se sumó a la iniciativa recibió de la Red Nacional los números correspondientes a pintar en el espacio público, con el fin de garantizar la continuidad de la misma. Si una ciudad recibe los números del 1 al 9, la siguiente recibirá del 10 al 19, y así sucesivamente.
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La propuesta, además, convoca a que el juego perdure, por eso los materiales deberán ser sostenibles en el tiempo y se debe contemplar también el mantenimiento.
“Esta gran rayuela unirá muchas ciudades argentinas que pueden estar lejos en distancia física pero están unidas por el objetivo de promover el juego y la participación activa como derecho de todas las niñas y niños”, destacó la subsecretaria de Niñez y Adolescencia, Miriam Díaz.
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