Las Grutas: comenzó el avistaje de ballenas y se celebra con paella en la tercera bajada
Comenzó formalmente la temporada con salidas embarcadas de hasta 10 pasajeros. Hoy a las 12.30 en la tercera bajada habrá una paella solidaria a beneficio de la biblioteca a 500 pesos la porción y se podrá comprar pescados y mariscos frescos.
En primera fila: una ballena franca a metros del bote semirrígido en el golfo San Matías. Foto: Agustín Sanchez / Rupestre.
Comenzaron a llegar a fines de julio, pero ahora están más presentes que nunca en el Golfo San Matías, y los paseos de avistaje para verlas de cerca ya arrancaron formalmente, con salidas desde Las Grutas y el Puerto San Antonio Este.
Se trata de las ballenas francas, que se adueñan de todas las miradas cuando emergen, haciendo estallar la calma aparente del mar. Es que sentirse pequeños en comparación a ellas emociona, al igual que el sonido de su respiración, que produce un soplido único, que salpica de gotas el paisaje.
Como viene ocurriendo año a año, serán 4 las empresas náuticas habilitadas para desarrollar la actividad. Cada una, en sus botes semirrígidos, podrá transportar un máximo de 10 pasajeros, y la experiencia durará cerca de dos horas.
En ese tiempo sucederá algo mágico, sobre todo para aquellos que nunca tuvieron la posibilidad de embarcarse. Ocurre que, al comenzar la navegación, todo se capta a través de los cinco sentidos, y, al principio, la vista es el que menos importa. Porque el agua primero se huele, después se prueba cuando salpica los labios convertida en bruma. Enseguida nos activa la piel con el picor de su sal. Luego se nos arremolina en los oídos, como si quisiera contarnos todos sus secretos a la vez. Y, recién después, se nos muestra, intensamente azul.
Por eso, si el cuento terminara allí, sintiendo en la cara la presencia del mar, también valdría la pena. Pero el Golfo San Matías ofrece mucho más, y los personajes que tienen su hábitat en sus aguas son todo un espectáculo.
Ellos son los delfines comunes y oscuros, los lobos marinos de uno y de dos pelos, los pingüinos y una diversa avifauna. Que, en esta época, suman a sus filas a los increíbles cetáceos que vienen a aparearse.
Mar adentro se aprecian mejor, y es probable que aparezca algún grupo de cópula, se vea una ballena solitaria o a una madre alimentando a su cría.
Para el lanzamiento de la actividad, que terminará mañana, se programaron además muchos eventos que harán que toda la ciudad sea una fiesta.
Entre ellos la gastronomía tendrá un rol determinante, porque se sabe que el destino también se disfruta a través de sus sabores.
Por eso, en las inmediaciones de la tercera bajada, desde temprano habrá degustaciones de pescados y mariscos. También una feria para adquirir, a precios módicos, los pescados y mariscos que capturan los pescadores de la localidad.
Como siempre, los merluzones y merluzas, los pulpitos, los salmones y otras delicias marinas se llevarán los elogios de los que aman elegir la materia prima con la que crear deliciosos platos.
Por otra parte, a las 12.30, en el mismo lugar, cocinarán una paella gigante con porciones a beneficio de la biblioteca Luis Piedrabuena, que se conseguirán a $500. Antes, se podrá ver el paso a paso, para aprender todos los secretos de su elaboración.
Volviendo a los paseos, la posibilidad de avistar cetáceos estará vigente hasta el 31 de octubre. Después, como ocurre durante todo el año, se podrán realizar salidas embarcadas, aunque sólo se disfrutará de las especies que residen de manera permanente.
Cabe recordar que este tipo de excursiones se realizan desde hace 10 años, y los estudios de impacto ambiental que continúan haciéndose develaron que no generan ningún perjuicio para las ballenas. Muy por el contrario, los animales se muestran receptivos a estos avistamientos.
En la zona, por otra parte, aunque las francas son las que ingresan en mayor número, también se han registrado avistajes de la especie jorabada, la sei y la minke, aunque con una frecuencia mucho menor.
“Estamos con mucha expectativa, y esperamos que esta temporada sea tan buena como se palpita” dijo Agustín Sánchez, el titular de una de las firmas que realiza las salidas náuticas, ubicada en el Puerto San Antonio Este.
-Los paseos de avistaje embarcado de ballenas y otros mamíferos marinos están $6000 para los adultos, y los menores de 12 años abonan un precio diferencial.
-Hasta el mes de noviembre, habrá una promoción vigente para los trabajadores que dependan del Estado, que llevará a $4800 la actividad.
-Para embarcarse se puede optar por salidas desde la tercera bajada o por el Puerto San Antonio Este, ubicado a 65 km de Las Grutas por ruta 3. Los que se embarquen desde el balneario podrán ver el frente costero del destino. Y los que vayan a SAE conocer los paisajes de una de las más increíbles de las tres plantas urbanas que componen la localidad.
-Al embarcarse hay que abrigarse mucho, porque mar adentro el clima es más intenso. Además, hay que usar protector solar en la cara, porque el sol ya se está haciendo sentir. Llevar anteojos y agua para hidratarse.
-Hoy habrá opciones imperdibles en la localidad. Como la paella que se cocinará en la tercera bajada, con porciones a $500, que se recaudarán a beneficio de la biblioteca. Será a las 12.30
-También se podrán comprar, en el mismo sector, pescados y mariscos frescos, a precios módicos. Habrá salmones, merluzas, merluzones, pulpitos y muchas delicias más
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