El mal estado de la Ruta 40 entre El Bolsón y Mascardi vuelve a encender las alarmas
Son unos 80 kilómetros de deterioro, pozos, grietas y desniveles profundos. Los automovilistas invaden el carril contrario o descienden abruptamente a las banquinas para esquivarlos, con el riesgo que conlleva. Otros sufren roturas.
Los pozos de la Ruta Nacional 40 comienzan a la altura del lago Guillelmo, a unos 40 kilómetros al sur de Bariloche, y se reiteran hasta El Bolsón. Foto: Chino Leiva
Los automovilistas y camioneros que transitan habitualmente la Ruta Nacional 40 entre Mascardi y El Bolsón toman los recaudos, por conocer la traza, para evitar los pozos que resurgen tras cada lluvia o nevada en la cordillera, pero para los turistas el problema se transforma en rotura de cubiertas, horas varados y largas espera de grúas en auxilio.
Esta semana una familia de La Plata, con un vehículo de alquiler, estuvo varada más de 12 horas a la altura de El Foyel porque como consecuencia de los pozos rompieron dos ruedas del automóvil. Esperaron toda la noche, con temperaturas extremas de -12°C, para recibir el auxilio que los trasladó.
Su caso volvió a poner en la escena pública el mal estado de la Ruta 40 y motivó -nuevamente- que la Municipalidad de El Bolsón lleve la voz del reclamo, al calificar de “desidia, irresponsabilidad, ineficacia y la falta de respuestas por parte de los funcionarios” de Vialidad Nacional, responsable de la traza.
El año pasado, en agosto el propio intendente Bruno Pogliano le puso una cifra a la cantidad de pozos que debía sortear para transitar desde El Bolsón hacia Bariloche. Eran 650, según indicó cuando emitió un enfático pedido de atención antes de que ocurra una tragedia.
El mal estado de la Ruta 40 en la agenda de los intendentes electos de la cordillera de Río negro y Chubut. Archivo
Los automovilistas en algunos sectores se arriesgan a invadir el carril contrario para esquivar los pozos de la Ruta 40. Foto: Chino Leiva
Pozos, grietas y desniveles en un largo tramo de unos 80 kilómetros desde Mascardi hacia El Bolsón. Foto: Chino Leiva
Vialidad Nacional en primavera realizó mejoras, con bacheo y carpeta asfáltica en los sectores más complicados, y dio un respiro en verano y otoño con una ruta en condiciones aceptables para transitarla. Pero ahora, tras las intensas lluvias, nevadas y heladas, volvieron a desprenderse los arreglos y a aflorar los pozos por sectores, a partir del lago Guillelmo hacia el sur, donde se intercalan trayectos en buen estado, donde es evidente que se colocó una carpeta asfáltica, y otros con un deterioro avanzado, que obligan a los automovilistas a invadir el carril contrario o descender abruptamente a la banquina, con los riesgos que implica, según constató ayer diario RÍO NEGRO.
Vialidad Nacional indicó que próximamente se informará las tareas que se realizarán y que se pueden concretar con ventanas de buen clima. Admitieron que el tramo se encuentra “muy deteriorado”.
No hay precisiones de una obra de mayor envergadura que el bacheo, pero todos admiten que se necesita una repavimentación para la traza que fue construida a mediados de la década del ’90 y que siempre tuvo parches. Estiman que podría ser incluida en el presupuesto 2024.
Esta ruta tiene un flujo constante de tránsito por el paso de camiones nacionales, los que hacen el recorrido Chile-Chile, los habitantes de la zona y los turistas que vacacionan este invierno en la cordillera rionegrina. El sector más deteriorado abarca los últimos 80 kilómetros desde Bariloche a El Bolsón.
El comerciante Raúl Brigues, propietario de un tradicional restorán en el paraje El Foyel aseguró que Vialidad había hecho un trabajo exhaustivo de reparación durante el verano pero que ahora “la ruta está otra vez detonada”. Señaló que el pavimento original data de 1994 y nunca se planificó un “reencarpetado”, como el que sí ejecutó el Estado nacional hace siete años en el tramo Mascardi-Barilloche y que luce muy bien. “Esa parte parece Suiza”, reconoció Brigues.
Brigues dijo que “está peligroso para el que no conoce”, porque los baches se suceden uno tras otro. “Pegás un llantazo y rompés -aseguró-. Hubo muchos casos en los últimos días”. Reconoció que aún los habituados deben tener máximo cuidado, porque algunos pozos pierden el material colocado a modo de parche “de un día para otro”, por efecto de la nieve y las heladas, sumado al paso de camiones de gran peso.
Señaló que el mal estado de la ruta “sin duda” les genera un perjuicio comercial. Agregó que para El Bolsón es un problema, porque el dato sobre la complicada transitabilidad de la Ruta 40 corre con rapidez y hay gente alojada en Bariloche que desiste de visitar esa localidad.
“A esta altura y por el estado actual de la ruta no sirven los trabajos paliativos ni maquillajes”, apuntó el municipio de El Bolsón que mencionó que los habitantes de la Comarca Andina transitan a diario este trayecto por cuestiones de salud, trámites y otras gestiones que deben realizar en Bariloche, pero además se ve afectada la afluencia de turistas en temporada ante la advertencia para los visitantes del mal estado del tramo.
En agosto pasado Diario RÍO NEGRO publicó un informe similar y días después el distrito Río Negro de Vialidad Nacional dispuso un trabajo de emergencia para reparar las partes más dañadas de la ruta con equipos de varias provincias patagónicas. En aquel momento incluso se involucraron en el tema el administrador general de Vialidad Gustavo Arrieta y el ministro Gabriel Katopodis.
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